Casi un mes después de que arrancaran las clases del segundo semestre del curso, la Universidad de Burgos va cerrando los datos correspondientes a la convocatoria de becas para estudios superiores del Ministerio de Educación. En líneas generales, el número de ayudas otorgadas resulta inferior al del pasado ejercicio académico, aunque se mantiene el porcentaje de concesiones y se incrementa notable la cuantía ligada a la residencia, lo que beneficia a los estudiantes que proceden de fuera de la capital.
Los datos que maneja la UBU revelan que 1.428 universitarios han recibido el sí estatal a las ayudas al estudio por excelencia debido a que se trata de las más elevadas en términos económicos. Esta cifra representa el 50,62% del total de solicitantes que superaron el primer cribado de valoración, que asciende a 2.821, frente a las 3.088 de hace un año, si bien en este último caso dicha proporción resultó ligeramente inferior, el 49,8%, con 1.538.
Este centenar de becas menos se atribuye, por tanto, a un descenso en el número de peticiones tramitadas por la academia burgalesa, que en una primera fase manejó 3.512 expedientes, 275 menos que el año pasado. Cabe recordar en este punto que esta cifra se reduce con posterioridad al incluir, por ejemplo, las solicitudes de los alumnos de segundo de Bachillerato con independencia de si estudiarán o no en la UBU, ocupándose después la entidad de los pertinentes traslados de expedientes.
A la hora de valorar ese descenso del número de solicitudes, la vicerrectora de Estudiantes, Verónica Calderón, apunta como posible explicación al hecho de que «haya mejorado la situación económica de los alumnos», si bien considera que lo importante «es que se mantenga o suba el porcentaje de beneficiarios», como así ha ocurrido. Además, destaca otro aspecto relevante de la convocatoria de este año, que pasa por un aumento de la cuantía que concede el Ministerio ligada a la residencia.
Calderón destaca que este montante ha pasado de 1.600 a 2.500 euros, lo que favorece especialmente a la Universidad de Burgos para retener y atraer al estudiantado de otras provincias, teniendo en cuenta que ya representa más de la mitad del total. No obstante, precisa que aún quedan variables por cuantificar en las becas concedidas vinculadas a los niveles de renta y que los alumnos recibirán «este mes o el que viene», si bien remarca que ya disponen de la mayor parte de la cuantía de la ayuda estatal, mejorándose así la situación vivida hace un año, cuando el 80% continuaba pendiente del correspondiente ingreso económico.
Hasta el momento, el importe global de las becas recibidas por estudiantes de la UBU asciende a 3,8 millones de euros, frente a los 5,6 millones del curso pasado. A falta de esas variables, Calderón confía en igualar chicha cuantía, aunque recuerda que puede no alcanzarse por la rebaja de las tasas.