Briviesca es grande pero no tanto como para que las caras de la gente no te suenen. Cristina Cano y Paula de la Fuente se conocían de toda la vida, pero de vista, lo habitual en la ciudad. Compartían pasillos en el instituto, que no aula, ya que estudiaban en cursos distintos, pero la pasión de ambas por transformar el tiempo libre de los más pequeños en momentos de diversión y aprendizaje hizo que sus caminos se juntaran. Primero como compañeras en el Espacio Joven, donde absorbieron de David Dito ese interés por ayudar a desarrollar habilidades, valores y actitudes positivas, y después como monitoras en los campamentos municipales.
Con un ingenio extraordinario a pesar de su edad -24 y 23 años respectivamente- ambas han tenido la capacidad de compaginar su formación universitaria con el trabajo. En un primer momento, Cristina se decantaba por estudiar Magisterio, pero la facilidad por los idiomas le llevó hasta la Facultad de Traducción e Interpretación de Soria. Paralelamente, continuaba inmersa en las teclas y el pasado año se graduó en el Conservatorio Profesional de Música de Burgos en la especialidad de piano, una titulación que le ha permitido desarrollar su carrera en una escuela de educación musical temprana con niños y bebés.
Paula finalizó el anterior curso el Grado en Magisterio de Educación Primaria y en junio aspira a obtener los mejores resultados en el de Educación Infantil. Soplar velas va ligado a que el tiempo libre escasea cada vez más, pero la ilusión de ambas por devolver a su ciudad una pizca de todo lo que han recibido de ella les ha empujado a tomar las riendas de Kokopelli, una empresa dedicada al ocio y tiempo libre que en junio dejó de funcionar.
Navidad, Carnaval, Semana Santa y el verano son sinónimo de vacaciones escolares, y en muchos casos de volver al pueblo. Pero no es solo eso. Para muchos padres y madres estos periodos acaban por convertirse en algunos de los momentos más estresantes del año por no disponer de tiempo que dedicar a sus hijos y se enfrentan a grandes retos en términos de conciliación familiar. "Conocemos el estrés que ello supone, yo en concreto trabajé con la fundadora de esta compañía en varios ocasiones, a la cual agradezco mucho lo que he aprendido, y consideramos que Briviesca necesitaba un servicio como el que ofrecemos. Por ello, hemos dejado a un lado el vértigo y nos hemos lanzado", comenta Cristina. Mujeres jóvenes, del mundo rural y empresarias. "Da un poco de miedo escucharlo", añade Paula. Si bien, el hecho de no empezar de cero, más bien con parte del trabajo realizado "nos genera más confianza para arrancar".
Con idea de "innovar un poquito tarde o temprano" las puertas de la sede de Kokopelli, ubicada en el centro parroquial, abrirán en diciembre a los niños de Infantil y Primaria siempre en horario de mañana. El área cuenta con amplias dimensiones para llevar a cabo los talleres y manualidades, y de una zona verde idónea para "jugar, practicar deporte y hacer los descansos en épocas en las que el clima lo permita", explican. Respecto a la necesidad de ampliar la plantilla, dependerá de la demanda de los usuarios, pero "probablemente en verano salgan más de dos grupos de usuarios y en ese caso tendremos que contratar monitores", declaran. Siguiendo la misma línea de trabajo que su antecesora, las jóvenes emprendedoras barajan la posibilidad de ampliar el servicio a algún fin de semana.
Con el 'papeleo' sobre la mesa y la puesta en marcha de la empresa, pero a falta de la compra del material y desarrollar la programación anual, se encuentran en un momento un tanto agobiante a la vez que ilusionante. La experiencia es un grado y estas briviescanas, sumergidas en el mundo del tiempo libre desde antes de cumplir la mayoría de edad, conocen 'al dedillo' los gustos de los pequeños de la ciudad, por lo que tienen más fácil generar sonrisas y marcar positivamente la vida de todos ellos.
Mañanas entretenidas. El centro parroquial de Briviesca abrirá sus puertas el 26 de diciembre (también el 27, 28 y 29; 2, 3, 4 y 5 de enero) a los usuarios que participen en la primera tanda del programa de actividades de Kokopelli, ideadas por las vecinas Cristina Cano y Paula de la Fuente. El periodo de preinscripción se alargará hasta el 8 de diciembre y deberá realizarse a través del teléfono 650279708 o por correo electrónico a la dirección kokopelliotl@gmail.com.
Los grupos de Infantil y Primaria quedarán divididos por edades y solo habrá 9 plazas disponibles para cada uno de ellos (existe la posibilidad de ampliarse a un tercero). Los horarios irán desde las 10 hasta las 14 horas, pero ofrecen un servicio de madrugadores desde las 9 y de continuadores hasta las 14.30. El precio irá desde los 48 euros por semana con un 10% de descuento para hermanos.