De la mano del español más famoso en los Estados Unidos, el chef José Andrés, y en su versión vegana, dado que es muy complejo exportar el alimento tradicional por su origen animal, la 'morcilla' de Burgos ha conquistado a los norteamericanos. Elaborado en la localidad de Quintanilla Vivar por Morcillas Tere, el preparado vegetal que desarrolla esta empresa familiar se consume ya en los restaurantes de referencia de Nueva York y pronto se extenderá por el resto del país.
La historia del primer morcillero de la provincia que salta el Charco y triunfa en los fogones de la primera potencia con sus elaborados es un cruce de caminos y de amistades entre burgaleses.
El proyecto nace de la mano de Carlos Sánchez, el maestro cortador de jamón e integrante del departamento de I+D del grupo de restauración del chef asturiano José Andrés, que suma una treintena de restaurantes repartidos por todo el mundo, desde Washington, su lugar de origen, hasta Miami, Nueva York, Los Ángeles, Chicago, Las Vegas o Dubai...
El proyecto del nuevo preparado vegano surgió en los momentos más críticos de la pandemia y es hoy una de las principales apuestas de esta empresa morcillera. - Foto: Patricia«Ofrecimos a Carlos Sánchez la posibilidad de comercializar las 'morcillas' veganas, cuya exportación es más sencilla a aquel país, aunque tienes que contar con un importador y un distribuidor propios. Nos ayudó muchísimo y nos abrió muchas puertas, porque es una persona muy reconocida allí. Se degustaron en diferentes catas en los restaurantes de José Andrés y la experiencia ha sido un éxito», relata Miguel González, la tercera generación de la empresa Morcillas Tere, surgida en los años 80.
Los americanos no comen productos elaborados con sangre de cerdo"
Durante los meses de noviembre y de febrero se han realizado cerca de 60 catas en diferentes puntos de Estados Unidos, todas de la mano de Carlos Sánchez. «A todo el mundo le gusta la morcilla tradicional, pero los norteamericanos no comen un producto elaborado con sangre de cerdo (aunque a los latinos les chiflan las morcillas que se hacen allí, que no tienen nada que ver con las de Burgos). Apostamos por la alternativa vegana, que tiene muchísimo tirón en este país».
La 'morcilla' vegana de Morcillas Tere se elabora con alubia negra, lentejas, aceite de oliva virgen extra y quinoa. Con la morcilla tradicional comparte la cebolla, el arroz y las especias, así como la forma y tiempos de cocción. Es un alimento sin productos cárnicos para veganos y vegetarianos e indicado para personas que tienen alguna alergia o intolerancia.
«Este producto nació hace dos años, en los tiempos muertos a los que nos obligó la pandemia. Contratamos a una empresa de Palencia para conseguir el alimento ideal y le dimos nuestro toque. Hoy, nuestro proyecto más interesante es este, porque tiene mucho recorrido y el consumo está cambiando. Un alimento tan tradicional como la morcilla ofrece una gran oportunidad para innovar...».
Una cojonuda. Su presentación en la sociedad norteamericana también es muy burgalesa, con la tapa más popular, la cojonuda, compuesta por la 'morcilla', un huevo de codorniz y la alegría riojana, el toque del pimiento rojo.
«Fue muy emocionante la cata en el restaurante 'El Nacional', el punto de reunión de los emigrantes españoles en Nueva York, donde antaño se censaban los emigrantes. Allí nos prepararon las 'morcillas' con unos huevos rotos. En el Mercado Little Spain, nuestro producto fue el protagonista en el homenaje que se hizo hace unos días a Paco de Lucía».
Miguel González está convencido de que Estados Unidos marcará el futuro de una empresa familiar que fundó su abuelo en los años 80, como alternativa a la grave crisis de paro que se vivió entonces y que desde hace tres años cuenta con una nueva fábrica en la que trabajan 18 personas.
Los dos tipos de morcilla que se elaboran en Quintanilla Vivar, la tradicional y la vegana, se comercializan en el mercado nacional y también se pueden comprar en la República Dominicana, Reino Unido, Portugal o Francia.
La tradicional está avalada por la Indicación Geográfica Protegida (IGP) y por las marcas Burgos Alimenta y Tierra de Sabor.
El burgalés Carlos Sánchez es un gran embajador de los alimentos españoles en USA"
«Es un orgullo que una de las personas más influyentes de Estados Unidos, un español como José Andrés, y que un burgalés, que integra un grupo de alimentación de más de 4.000 personas, colaboren con nosotros y ayuden a dar el salto a otras empresas españolas», reconoce Miguel González, que aún no ha tenido el gusto de conocer al cocinero universal, muy implicado ahora en las causas humanitarias en Ucrania y Palestina.