Nueve partidos restan para la conclusión de la primera vuelta, nueve partidos que el Burgos CF debe aprovechar para llegar al parón navideño en una situación tranquila y con el horizonte de lograr la permanencia cuanto antes. Ahora mismo cuenta con 16 puntos, una buena renta y el objetivo es acercarse a los 30 en este primer tramo de competición. Para ello es necesario que mejore sus prestaciones como visitante porque no siempre va a ganar sus partidos en El Plantío. 

A priori el calendario es favorable para el conjunto de Jon Pérez Bolo, ya que de esos nueve rivales, seis de ellos los tiene por detrás en la clasificación ahora mismo y otro, el Racing de Ferrol, a cuatro punto. Real Zaragoza y Espanyol se presentan como principales escollos. El primero es el más próximo, esta noche en El Plantío. El segundo, la última jornada de 2023, el 20 de diciembre, en el RCDE Stadium.

La visita del Real Zaragoza marca el inicio de este último tramo de competición hasta navidades, el final de la primera vuelta en la que todos los equipos pasan la primera evaluación y se marcan los objetivos para la decisiva segunda vuelta. Para la mayoría, llegar a las vacaciones con una puntuación cercana a los 30 puntos es un éxito, al menos para todos aquellos que piensan en la permanencia y en vivir un final de temporada tranquilo.

El conjunto maño no es el mismo que hace un par de meses. Comenzó como un tiro la competición y durante varias jornadas se visitó de líder. Sin embargo, ha sufrido un bajón inexplicable y solo ha sido capaz de sumar cinco de los últimos 21 puntos en juego. La consecuencia, ha bajado a la novena posición. Pero también han aparecido las primeras dudas sobre el trabajo de Fran Escribá como máximo responsable técnico. De hecho, ya se hacen quinielas en Zaragoza sobre el futuro del entrenador catalán si pierde hoy en El Plantío. El conjunto maño acude necesitado a la cita, en la que se encontrará a un Burgos infalible como local pero que también tiene la presión de ganar dado su pésimo rendimiento cuando juega lejos de su estadio.

Y precisamente esas prestaciones como visitante son las que pueden marcar su futuro. Su fiabilidad en casa está demostrada, el apoyo de su gente es incuestionable, pero su asignatura pendiente está en el resto de estadios y acumula un suspenso tras otro.

A partir de mañana tiene cinco oportunidades para acabar con esta especie de maldición que lo ha colocado como el único equipo incapaz de puntuar como visitante.

Rivales. En las doce primeras jornadas de Liga el Burgos CF ya se ha enfrentado a siete de los ocho primeros clasificados y ha obtenido dos victorias de mérito ante Leganés y Eibar. También ha superado a rivales como Elche o Real Oviedo.

Ahora, en las nueve jornadas que restan el calendario se hace más asequible, contra rivales que están por detrás en la clasificación.

Solo Espanyol, Real Zaragoza y Racing de Ferrol le superan en la clasificación. Los otros seis son equipos de la zona baja de la clasificación, incluso tres de ellos están ahora mismo en puestos de descenso y otros dos son recién ascendidos.

Tras el partido de esta noche, el Burgos viaja a Elda para medirse al Eldense que entrena Fernando Estévez. Lo hará después de afrontar el partido de Copa el jueves en Alicante ante el Hércules.

Una semana después llega a El Plantío el Alcorcón, que está en posiciones de descenso. En la jornada 16 el Burgos se traslada a Ferrol para jugar ante otro recién ascendido, el Racing de Ferrol, que está cuajando una gran temporada. Después llegan el Andorra, en casa, y el Amorebieta, en Lezama, antes del derbi ante el CD Mirandés. Para concluir esta primera vuelta, dos desplazamientos, Cartagena y Barcelona.