Aunque ya no forman parte de la Iglesia Católica, las exmonjas de Belorado siguen dando de qué hablar más de 8 meses y medio después de su cisma. En este caso la protagonista -a título personal- es la exabadesa sor Isabel de la Trinidad, de nombre Laura García de Viedma, a la que la Policía Nacional rastrea tras haber completado una venta de 1,7 kilos de oro en un establecimiento especializado de Burgos. El importe que la exlíder del Monasterio de Santa Clara se ha embolsado con esta operación ronda los 130.000 euros.
La investigación se centra en averiguar el origen de esos lingotes, alguno de los cuales son de un tamaño tan considerable que ha sorprendido a los agentes. Estos tratan de esclarecer si el oro procede operaciones especulativas de compraventa o si, por contra, tiene origen en un posible achatarramiento y posterior fundición de bienes.
Además del oro, el 'botín' que la exlíder de las monjas ha dado salida consta de una moneda americana cuyo valor es también muy alto. Por el momento se desconoce si es también fruto de una compra pasada a nivel especulativo o si, por contra, forma parte de algún tipo de donación recibida por las exreligiosas.
En paralelo se ha ordenado detener el procesamiento de ese cargamento, que se encuentra custodiado en la tienda donde se efectuó la venta. Según ha podido conocer este periódico, existe constancia de que en 2020 las exmonjas invirtieron una cantidad que podría rondar los 34.000 euros en este metal precioso a modo especulativo. No obstante, esta cantidad apenas representa 300 gramos, por lo que la Policía Nacional quiere resolver de dónde salen los 1.400 restantes.
La investigación se enclava dentro del constante operativo que este Cuerpo realiza a las operaciones de compraventa para evitar el blanqueo de capitales, la desaparición de objetos robados o el incremento del mercado negro.
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