El Ayuntamiento está decidido a levantar en el entronque de la calle Corazas con Tahonas el aparcamiento diseñado para dar cobertura a la falta de plazas de estacionamiento que afecta al Casco Histórico Alto y aclarará antes de verano las incógnitas que rodean a un proyecto condicionado por el resultado del estudio arqueológico.
Los trámites previos programados por Urbanismo se han alargado en los últimos meses y esta actuación tan importante para la suerte del planteamiento municipal se encuentra a la espera de la asignación de la partida presupuestaria. Mientras, el concejal del área, Juan Manuel Manso, trasladó los avances realizados a los vecinos en un encuentro reciente.
Una vez superado este trámite se dará luz verde a un estudio técnico que contará con un presupuesto de 18.000 euros y que dispondrá de dos meses para realizar las tareas sobre el terreno. La riqueza escondida bajo el suelo de ese sector histórico de la ciudad hace prever la aparición de vestigios de mayor o menor interés que determinarán si la parcela escogida puede albergar la infraestructura planteada para dar respuesta al problema asumido.
Las próximas catas determinarán el valor patrimonial de los restos arqueológicos que pudieran aparecer en esta zona ubicada en las faldas del Castillo. Esa es la clave que marcará el futuro de un proyecto que tiene claro su planteamiento a seguir.
En el último trimestre de 2023 el área de Urbanismo consultó a la Comisión de Patrimonio Cultural de Castilla y León las obligaciones arqueológicas y patrimoniales que marcarán los detalles técnicos del estudio encargado, con el fin de centrarse en los principales puntos a tener en cuenta para el desarrollo del futuro proyecto.
Este movimiento debería agilizar la cuestión para saber si Corazas es el lugar definitivo donde se construirá esta infraestructura o si, por el contrario, será necesario buscar otro emplazamiento. El Ayuntamiento se plantea otras alternativas, aunque confía en disponer de esta nueva dotación en el lugar elegido.
Los responsables de Urbanismo ya aparcaron en su momento las alternativas encontradas inicialmente tanto en el entorno de San Esteban como en la parte alta de Fernán González para centrar sus esfuerzos en el solar situado en la céntrica confluencia de la calle Corazas con Tahonas.
Esta opción, a diferencia de los aparcamientos en altura previstos en Gamonal (calle María Amigo) y en la zona sur (en el Bulevar, frente al colegio Sierra de Atapuerca y la escuela infantil Los Gigantillos), salva un escollo administrativo fundamental al estar ya contemplada en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU). Por ello, no será necesario hacer ninguna modificación.
El terreno disponible supera los 6.400 metros cuadrados, aunque se podrán aprovechar alrededor de 4.000 para dar forma al proyecto pendiente del estudio arqueológico y la posterior aprobación de Patrimonio para construir un aparcamiento de 250 plazas destinadas a los residentes del entorno.
Diseño. A diferencia de otros proyectos de aparcamiento no se excavará el terreno, sino que se vaciará la pequeña ladera que preside la parcela para ganar el espacio necesario para esta actuación. Además, se incluirá también el actual apeadero improvisado al abrigo de un lienzo cuyo estudio formará parte del Plan Director de la muralla diseñado por el Ayuntamiento de Burgos.
El diseño de la futura dotación deberá integrarse con un entorno protegido y evitar una idea agresiva. Una vez ganado todo el terreno ocupado ahora por la mencionada ladera, se aprovechará el desnivel resultante para levantar la fachada exterior. Mientras tanto, se buscará la manera de armonizar el resto de elementos con el objetivo de incluir esta actuación en los presupuestos municipales de 2025.