Gregorio del Santo es un enamorado de la historia de Burgos. Su pasión le lleva a bucear entre todos los archivos de la capital burgalesa y sus ganas de ponerlo en común le han llevado a escribir diferentes libros para divulgar los conocimientos que va adquiriendo. Su última obra es Casas del canto, mancebías, festejos taurinos e intrahistorias en Burgos, y hace un recorrido desde el siglo XV hasta el XIX. «El amor a Burgos y el mostrar su rica historia, tanto los momentos buenos como los buenos es lo que me ha llevado a escribirlo», declara del Santo.
Su trabajo se divide en cinco capítulos distintos en los que se deja pocas cosas por contar. Va desde la evolución de los relojes que han tenido como referencia los burgaleses hasta enumerar diferentes edificios de los que hace un repaso temporal. También efectúa una parada en la historia taurina porque es precisamente ahí donde empieza todo. Fue discutiendo sobre la fecha real de inauguración de la plaza de toros de los Vadillos en Burgos, cuando al no ponerse de acuerdo con su inseparable amigo Miguel Ángel Salinas, decidió ir a Madrid a repasar el Boletín de Loterías y Toros. A partir de ahí se fue topando con datos que ha ido recopilando.
Fruto de esos apuntes se dio cuenta de que tenía entre sus manos un contenido que podía exportar y divulgar, por eso publicó en 2021 Crónicas, acontecimientos y apuntes inéditos de personajes relevantes en Burgos, siglo XIX. El libro que ha visto la luz este mismo año viene a ser la segunda parte de este ejemplar, del cual agotó las existencias.
«De las cosas que ya se han escrito no he querido incluir nada», relata Gregorio del Santo, que ha optado por la originalidad, queriendo entrar en la historia sin pisar nada de lo que ya se hubiese publicado anteriormente. Uno de los relatos que se dan entre las páginas de su obra es el que habla sobre la venta judicial de la iglesia de la Merced, con los jesuitas jugando al despiste para hacerse con su propiedad después de las desamortizaciones de Mendizábal. También tiene un hueco la biografía del Conde de Berberana, Gil Delgado, o la del importante arquitecto Fernando González de Lara, del que se cumplen 300 años de su nacimiento.
«Todos nos hemos creído las cosas que nos han ido contando a lo largo de nuestra vida, pero si lo vuelves a leer te das cuenta de la realidad». Del Santo, con este trabajo de documentación que arrancaba algunos días a las siete de la mañana para coger sitio en el Archivo Diocesano, ha ido desmontando mitos que un día creyó como ciertos. Para escribir él mismo se ha encargado de que, a parte de comprobar que fuese algo inédito, estuviese contrastado.
Cada página está redactada con el mimo de quien ha dedicado su tiempo y cariño en juntar un pedazo de la historia de la capital burgalesa. Quien lo lea se encontrará con ilustraciones, explicaciones y muchos datos curiosos que le harán sumar conocimientos sobre la ciudad, porque el saber está en los libros y Burgos tiene mucho que contar.