Un pinchazo por culpa de un clavo que había en la carretera puede ser casualidad. Cuando son más de cuatro, en cuestión de pocos días y en el mismo lugar, ya no. Vecinos de Cardeñadijo y conductores que a diario toman la carretera BU-800 tienen claro de que alguien está boicoteando el tramo entre la capital y el municipio. En las cunetas han aparecido numerosos tornillos con punta y un taller de la localidad ha reparado varias averías de este tipo en los últimos días.
Las redes sociales y aplicaciones especializadas en avisos no sólo están para advertir de la presencia de controles y radares en la carretera. Muchas veces sirven para alertar de peligros que se pueden encontrar los conductores en determinados puntos. Y es el caso del trazado que une Burgos con Cardeñadijo. En los últimos días han sido varios los mensajes informando del hallazgo de clavos en el primer tramo de la BU-800.
Otros usuarios habituales de esta vía no sólo confirmaron la alerta, sino que advirtieron de que no es una cuestión aislada. Son ya varias semanas las que se han encontrado objetos metálicos sobre la calzada a la altura del puente de la autovía de ronda. Son tantos los episodios contabilizados ya que todo parece indicar que alguien está boicoteando este tramo desde hace tiempo.
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