El run run sanjuanero gana peso en el día a día de la ciudad. Las cuadrillas cierran sus programas y la blusa cada vez está más presente en las conversaciones cotidianas, aunque hay un sector en el que San Juan del Monte ya está muy presente: la hostelería. Los bares de Miranda han iniciado la cuenta atrás, en un momento en el que toca mirar cámaras y revisar los almacenes, para hacer los pedidos con los que afrontar los días grandes, tras el estallido del Bombazo el 18 de mayo. Los negocios también calculan qué personal necesitarán, en unas fechas en las que a la ciudad llegan camareros de fuera para cubrir todas las carencias de mano de obra. 

Así lo explica el presidente de la asociación Altamira, Pepe Rey, quien reconoce que «llevamos casi 15 días de San Juan del Monte, porque para nosotros hay mucho trabajo previo, para reunirte con las cuadrillas y zanjar todos los pedidos». En su caso, la plantilla prácticamente se duplica y lo hace gracias a los trabajadores que llegan de fuera a través de empresas especializadas. Con esta alternativa solucionan un déficit en la ciudad, pero «además te facilitan toda la tramitación, ya que te llegan con la seguridad social y todo en orden», aclara el representante del sector. Rey cuenta con un servicio de catering, lo que hace que necesite mucho personal, aunque en los bares también notan el pico de trabajo.

En uno de los establecimientos emblema del San Juan del Monte nocturno, en La Madre, reconocen que tienen que mirar bien de cuántas personas disponen, «aunque nosotros la verdad es que tenemos una plantilla amplia», agradece Daniel Nunes. En cualquier caso, si un sábado normal entran en su barra cinco personas, para las fiestas «necesitamos diez», por lo que admite que también tiran de contactos y contratan a excamareros que están dispuestos a echarles una mano. 

Cristian López, de El Amor Nunca Muere.

Más allá de este tipo de relaciones, los bares de copas también aprovechan las empresas que ofrecen camareros. En el Amor Nunca Muere, Cristian López, reconoce que «hemos llamado a un par de personas de fuera», aunque no oculta que le gustaría tirar de vecinos de la ciudad. De todas maneras, puntualiza que resulta difícil encontrar personal y a dos semanas de comenzar San Juan del Monte no pueden esperar y tienen que tener todo organizado. De hecho, ya ha iniciado a acumular provisiones para no sobrecargar a los proveedores y «esta semana ya hemos hecho un pedido para la alubiada con vistas a que sobre, la siguiente se pide otro y justo la previa se organiza lo último, pero al final la inversión es desde ya porque adelantamos el dinero pese a que en parte vamos a ciegas», manifiesta López.

Los esfuerzos en los preparativos también se notan en locales que están más destinados a los desayunos, las comidas, las cenas y alguna que otra consumición para los vermús de las cuadrillas. En la Taberna Berlín, Soraya Martínez habla de todo lo que viene por delante, ya que «nosotros ya calentamos motores el Fin de Semana del Blusa con los almuerzos, porque tengo ya mucha gente con reservas y por la noche en las cenas a tope». Tanto ella, como Laura Domínguez en el Acero, reconocen que afrontarán las fiestas con sus plantillas habituales, aunque las propietarias reconocen que para esos días ellas no tendrán mucho descanso. «Es uno de los fines de semana más importantes del año», admite Martínez, algo que comparte Domínguez, quien ya tiene cerradas «a todas las cuadrillas y también a grupos grandes, porque también tenemos algunos», para lo que ya trabajan en algunas elaboraciones.

Cristian López | El amor nunca muere

Daniel Nunes, de La Madre.

"Con el cambio del sábado tenemos la duda de cómo va a responder la gente"

El Amor Nunca Muere vivirá un San Juan del Monte diferente, porque la música de dj desaparecerá durante el día, para dejar el protagonismo a las charangas. "Creo que vamos a echar en falta algo", afirma Cristian López, quien reconoce que con estos cambios "tenemos la duda de cómo va a responder la gente". De momento, sabe que las cuadrillas han respondido pese a todo. "Es un gran gesto que levanta el ánimo". Para el fin de semana fuerte del 18 y 19 de mayo, López aclara que pasarán por su bar 14 cuadrillas desde el sábado por la tarde.

Daniel Nunes | La Madre

"Son fechas importantes para la hostelería, pero también lo son para toda la ciudad"

La Madre representa uno de los epicentros de las fiestas. "Son unas fechas importantes para la hostelería, pero también lo son para toda la ciudad", recalca Daniel Nunes, quien acogerá en su local a 16 cuadrillas, con las que empezarán a trabajar "el viernes por la tarde antes de pregón". El consumo en estos días "se multiplica", aunque en La Madre también resaltan la ayuda que prestan a las peñas con el patrocinio y la rebaja en las consumiciones. En cualquier caso, Nunes puntualiza que "nuestro margen de beneficio es menor, pero el consumo se incrementa".

Soraya Martínez, de la Taberna Berlín.

Soraya Martínez | Taberna Berlín

"Las cuadrillas ya tienen todo cogido, pero eso también nos facilita el trabajo previo"

San Juan del Monte se siente en todo tipo de bares, en especial, si están en un punto céntrico. En la Taberna Berlín darán de comer a muchos sanjuaneros, desde los almuerzos hasta las cenas, aunque su propietaria Soraya Martínez reconoce que "las cuadrillas ya tienen todo cogido, pero eso también nos facilita el trabajo previo". Organizar todo con esa base lo agradece, si bien reconoce que las cuadrillas miran mucho lo que gastan. Aun así, lo entiende y recuerda que las peñas también tienen gastos y no se libran de la inflación. "Les ha subido un montón todo".

Laura Domínguez | Acero

"Parece que queda mucho, pero nosotros ya lo tenemos que tener casi todo preparado"

No están en pleno centro, aunque en el Acero reconocen la importancia de estas fiestas, porque San Juan del Monte también se nota para ellos. En su restaurante dan de comer "hasta 200 personas", ya que hay peñas que apuestan por cenas más desenfadadas en las que entran y salen sin necesidad de sentarse. Para afrontar el pico de trabajo que se les viene por delante cierran los menús con los grupos con los que tienen reserva. "Justo ahora estamos pidiendo a los proveedores lo que necesitamos", explica una precavida Laura Domínguez. "Parece que queda mucho, pero nosotros ya lo tenemos que tener casi todo preparado", añade.