La residencia mixta de Callejonda atraviesa una situación delicada en Miranda de Ebro. La falta de personal empuja a la plantilla al límite y el sindicato Comisiones Obreras utiliza palabras como «colapso» o «desbordada», para que se entienda la situación. La denuncia pública llega en un momento en el que se preparan los calendarios laborales del próximo 2025. La secretaria comarcal del sindicato y trabajadora del centro, María Ruiz, lamenta que el déficit del personal se nota en todos los servicios y utiliza varios factores para explicar la fotografía actual. El primero tiene que ver con las carencias estructurales de la plantilla, el segundo las mejoras aplicadas gracias al nuevo convenio, como las 35 horas, y el tercer elemento está en la apertura de todas las camas. De hecho, en estos momentos después años de reducción tras la pandemia, la instalación contabiliza unos 180 usuarios en sus 191 plazas habilitadas.
Hace poco más de un año, también como secretaria de la sección sindical de CCOO en la Junta de Castilla y León, Ruiz criticaba que la Gerencia de Servicios Sociales rebajaba la cifra de usuarios para ahorrar personal, lo que dejaba camas libres a pesar de la demanda. Ahora la realidad ha empeorado, al menos para la plantilla, ya que «en otros centros después de aplicar las 35 horas semanales y la ponderación nocturna, hubo algunos que por circunstancias de la producción metieron personal, pero aquí no se hizo porque se decía que no estaba llena», matiza la responsable. Ahora, con un gran porcentaje de las camas ocupadas tampoco se han reforzados los servicios «y encima nos vuelven a plantear los calendarios del año pasado, pero con el mismo personal», afea Ruiz.
Las modificaciones logradas gracias al convenio laboral se cuadran bajando el número de trabajadores por turno, tal y como detalla la representante sindical, aunque explica que los problemas de la residencia mixta van más allá de los últimos cambios. A su juicio, la instalación necesita una nueva estructura para el funcionamiento «de uno de los centros más grandes de la comunidad», recuerda.
Las carencias al menos se sitúan en las 20 personas, aunque pueden ser más porque todavía analizan cuánta gente se necesita por cada sección. Aun así, servicios como el de lavandería «están desbordados», pero la urgencia llega también a otros como el de mantenimiento, el de comedor o el personal de servicios. Además, apunta la necesidad de incorporar a una enfermera más o «siete u ocho auxiliares» para cuadrar todos los turnos, aunque tendrían que hacerse con contrataciones temporales.
La solución definitiva podría llegar con una actualización de la Relación de Puestos de Trabajos, aunque esa vía puede tardar más de un año «y hay servicios en los que se necesita de manera urgente el personal», afirma Ruiz. Esto no quita para que espere avances en la RPT del personal laboral, una vez que ya está a punto de entrar en vigor la de funcionarios el 1 de octubre.
Por eso, puntualiza que se podría ampliar plantilla rápido «por circunstancias de la producción», como ya se hizo en algunos centros en enero de este año cuando al cuadrar los nuevos horarios se vio la necesidad de sumar trabajadores. Ruiz espera que esta solución llegue, esta vez sí, también a la residencia mixta de Callejonda donde lanzan un SOS que recuerdan que redundaría en la calidad asistencial de los usuarios.