La tarde del miércoles, Cristina Palacios se montó en el autobús en la parada que hay frente al número 155 de la calle Vitoria. Acababa de sacar 500 euros de cara al fin de semana, pues pensaba marcharse de viaje con su pareja Álvaro. Pero al sacar la tarjeta del bus la cartera cayó al suelo sin que ella se percatase. Había perdido todo y ni siquiera era consciente.
No lo fue hasta la noche, cuando alguien le avisó de que en redes sociales una persona buscaba a la propietaria del monedero. Su ángel de la guarda se llama Víctor García Peral. Un día después de haberla perdido, los protagonistas de esta bonita historia se reencontraron.
«Ese día había decidido irme en bus y estaba esperando en la parada cuando vi que un chico cogía la cartera del suelo. Le pregunté si era de él y me dijo que no, así que yo me hice cargo», comenzó su relato este buen samaritano. Nada más abrirla, fue consciente del disgusto que Cristina podría llevarse cuando se diese cuenta de que la había perdido. «Dentro tenía tarjetas, documentación y 500 euros. Pensé que podía ser una persona que iba a pagar el alquiler de su casa, así que llamé a la Policía Local para que la identificasen», continuó.
Cristina perdió la cartera con 500 euros al subir al bus en Gamonal. Víctor García lo vio y movió cielo y tierra para dar con ella y devolvérsela. Lo hizo ayer y Diario de Burgos fue testigo del encuentro. - Foto: ValdivielsoEsta primera gestión fue baldía. Su teléfono no aparecía en la base de datos. Observó entonces que el DNI recogía una dirección de La Rioja, así que decidió llamar a Logroño. Pero tampoco dieron con la propietaria del monedero. Quiso hilar más fino, pues la localidad concreta de residencia era Villamediana de Iregua, así que se puso en contacto con la Guardia Civil, donde una agente tomó nota del aviso, pero nunca le devolvió la llamada.
(El reportaje completo, en la edición impresa de este viernes de Diario de Burgos o aquí)