Sostenible y alejada de la zona de confort

I.L.H. / Burgos
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María Lafuente, Raquel Tomillo, Natacha Arranz, Eulalia Mateos, Di de Sant, By Imelda y Ainhoa Salcedo apuestan e innovan con materiales reciclados y duraderos en los diseños que desfilaron en el Fórum

María Lafuente (c) abrió la jornada de desfiles en el Fórum. - Foto: Jesús J. Matías

La primera colección que se presenta en una pasarela hecha con corcho sostenible certificado (solo se corta la corteza para que el árbol se regenere) lleva la firma de la creadora leonesa María Lafuente, que ayer abrió los desfiles del Espacio Moda Castilla y León que organiza la Junta y la CEOEen el Fórum. Es pionera en este tipo de material y en el uso de calzado artesanal de yute (con Bonadona), además de apoyar causas sociales y artísticas, como los diseños que realiza para Rozalén e India Martínez o los que crea para los bailarines del Ballet Contemporáneo de Burgos. 

Presente en las pasarelas de moda organizadas por la Junta desde que ganó la primera edición del Concurso de Diseñadores, Lafuente mostró ayer su colección Kokoro  (corazón, en japonés), marcada por el corcho, los complementos hechos con neumáticos y las prendas con tejidos sostenibles de tencel. En tonos rosa pastel, nude, blanco, el color de la hoja seca y el verde, sus diseños abogan por proteger el medio ambiente:«La tierra y la naturaleza son la fuente más grande de inspiración, de ahí estas arquitecturas florales que me acompañan casi siempre y la búsqueda de la innovación en los materiales», explicó ayer tras su desfile.

La filosofía de María Lafuente de apostar por la moda sostenible y el uso de los materiales reciclados se va imponiendo cada vez más entre en el sector. Eulalia Mateos, que presentó su colección Indómita, también apuesta por tejidos naturales como el punto de algodón egipcio, lana merina, organza, satén y viscosas con certificación EcoVero. «Retomo mis líneas más románticas con cuellos bebés, mangas abullonadas, musolinas, tejidos naturales con el toque urbano y una mezcla de dulzura y empoderamiento», comentó desde el Fórum. 

La creadora vio con buenos ojos esta nueva propuesta de la Junta y CEOE que va «más allá de los desfiles». «Nos interesa mucho el sector textil, la comercialización, la venta... la pasarela es un espectáculo que tiene que repercutir en la creación de empleo, en el futuro y en una mayor presencia de jóvenes diseñadores», añadió. 

Compartía ayer esa opinión la burgalesa Raquel Tomillo, que se volcó en una colección «con ceremonia algo más funcional para que no la aparques en el armario y puedas darle salida», mirando también a esa moda que quiere rentabilizar las prendas y hacer un consumo más responsable. En su caso, optó por tejidos lisos y algún relieve «porque las estampaciones han saturado el mercado». 

De su zona de confort dijo haber salido Ainhoa Salcedo, que presentó una veintena de diseños de novia para 2025 con creaciones en las que sobresale el uso de la capa en lugar del velo. «Han pasado las épocas duras y volvemos con encajes, escotazos hasta el infinito, tirantes, transparencias en los costados... Viene una novia muy chic y cómoda a la vez».

Con el color rosa por bandera salió también del espacio habitual en cuanto a los tonos Natacha Arranz, que homenajeó a la niña que llevamos dentro. Con tejidos sostenibles y naturales, la estrella fue el algodón natural 100% ecológico. La tarde de desfiles se completó con los diseños a partir de pañuelos de Di de Sant y los bolsos, vestidos y zapatos de By Imelda, inspirados en Manhattan. 

Hoy quedan otros siete desfiles, además del concurso con 15 diseñadores emergentes.