Gritar y gritar hasta conseguir una respuesta. Los vecinos de Belorado llevan cortando la Nacional 120 desde septiembre para exigir la llegada de la autovía, pero por ahora no han tenido la esperada contestación del Ministerio de Transportes a su petición. «¡Óscar Puente, haznos caso ya!», clamaban esta tarde con altavoz y micrófono en mano. Y, de paso, han dado el pistoletazo de salida al Carnaval con disfraces preparados para la ocasión que iban desde hombres invisibles -¿quizá pensando en algún político?- hasta radares de velocidad.

Conchi Maestro ha optado por un disfraz terrorífico para representar la cantidad de muertes que ha habido en la N-120 y evidenciar así la preocupación por el hecho de que no se haga nada por acabar con esta situación. «Ha habido aquí múltiples accidentes y muchos de ellos mortales, es un peligro para todos los que vivimos en los pueblos de esta zona porque no tenemos otra carretera», comentaba la mujer.

Los pequeños Pablo, Amara, Artenis y Mencía, algunos aún en carrito, también estaban allí junto a sus padres. Probablemente sean «muy mayores» cuando llegue la A-12 -si es que llega al ritmo que va-, bromeaban. Por lo menos, ahí queda el recuerdo en forma de foto y podrán ver si se hace realidad y si la protesta dio el efecto deseado.

Los vecinos de Belorado se han disfrazado hoy para que desde el Ministerio de Transportes por fin respondan a su petición. - Foto: Patricia González

Con la imagen de un premio Oscar y otra de un puente 'llamaron' al ministro de Transportes desde el municipio. Precisamente, una foto de Óscar Puente, mirando el móvil con las gafas de ver de cerca en el escaño del Congreso, ocupaba parte del cartel con el que se anunciaba la movilización, pero parece que tampoco se querían herir sensibilidades.

Eso sí, humor e ingenio que no falten. Y en el lugar de presentaron al instante dos topógrafas, con casco y chaleco incluido, que aseguraban tener en exclusiva los mapas de la nueva autovía. Ojalá eso sea realidad pronto, pensarían los allí presentes, pero por ahora todo es cosa del Carnaval. Ay, no hay que llorar. Que la vida es un Carnaval. Y es más bello vivir cantando. 

(Reportaje completo e imágenes, mañana en la edición impresa de Diario de Burgos)