Investigan los pinchazos por clavos en la carretera

F.L.D. / Burgos
-

La Guardia Civil pone el foco en la extraña aparición de clavos en el tramo de la BU-800 entre la capital y Cardeñadijo. La problemática comenzó hace meses

Operario de un taller de Cardeñadijo reparando el pinchazo en un neumático. - Foto: Alberto Rodrigo

Cuando hace unos días multitud de vecinos de Cardeñadijo y conductores que a diario recorren la carretera que une el municipio con la capital alertaron de que a la altura del puente de la BU-11 se habían encontrado numerosos clavos que provocaban pinchazos, la Guardia Civil ya estaba al tanto. Llevan semanas recibiendo alertas por este motivo. Tantas, que ha obligado a iniciar una investigación que, reconocen desde el propio cuerpo, es sumamente compleja.

Parece evidente que la aparición de clavos, tornillos especiales para pladur y otras pequeñas piezas metálicas puntiagudas no es casualidad. Ya son semanas, incluso meses, que en el tramo de la BU-800 comprendido entre Burgos y Cardeñadijo se producen numerosos pinchazos, con el peligro para circulación que eso genera. Es una cuestión que se habla entre los vecinos del pueblo, entre usuarios habituales del trazado y que aparece con frecuencia en las redes sociales.

La Guardia Civil conocía la situación. Últimamente han recibido «muchas llamadas» de aviso en este punto, confirman fuentes del Instituto Armado. Es por eso que agentes especializados han empezado las pertinentes gestiones para detectar al responsable, pues todo indica a que se colocan a conciencia. La investigación, aclaran, no es nada sencilla.

Una de las cuestiones que llama la atención y que a priori confirma que los clavos y tornillos no están allí por casualidad es el lugar donde suelen aparecer. Se encuentran en ambos lados de la calzada, lo que incrementa el peligro de los vehículos en caso de pinchazos.

No es la primera vez que la Benemérita tiene que investigar hechos de este tipo. Hace unos meses, unos vecinos de Fuentelcésped, en la Ribera, se quejaron de que muchos vehículos aparecieron con clavos en los neumáticos. Actos que, igualmente, insistieron en que no eran fruto de la casualidad al producirse en un corto espacio de tiempo. En 2020, en La Rioja, se detuvo a dos personas por actos vandálicos muy similares.  

(Más información, en la edición impresa de este miércoles de Diario de Burgos)