Bruselas relajará el uso de fotos geoetiquetadas

SPC
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Se trata de otra de las medidas para rebajar la carga administrativa, tal y como reclamaron los agricultores en las protestas de primeros de año

Bruselas relajará el uso de fotos geoetiquetadas - Foto: E.G.M Eugenio Gutiérrez Martínez

El Ejecutivo comunitario ha publicado una propuesta que suprime la obligación de los Estados miembros de garantizar que el seguimiento de la Política Agraria Común (PAC) se lleve a cabo utilizando fotografías geoetiquetadas para 2027. El reglamento es otra medida para simplificar la Política Agrícola Común (PAC), ha sido discutido con los Estados miembros y está en consulta pública hasta el 9 de julio.

La Comisión quiere flexibilizar los requisitos para incrementar el uso de fotografías geoetiquetadas (fotografías digitales con datos sobre la ubicación) para comprobar la elegibilidad de las subvenciones para las explotaciones agrícolas. El reglamento de aplicación de 2022 sobre sistemas de control estipula que los Estados miembros deben garantizar que el 70% del seguimiento de las actividades se lleve a cabo mediante fotografías geoetiquetadas para 2027, como parte del objetivo del bloque comunitario de modernizar la PAC, y correspondería a las administraciones nacionales crear aplicaciones móviles viables para recopilar datos.

Pero, según la nueva propuesta, las fotografías geoetiquetadas no deberían tener prioridad «en comparación con otros datos con un valor al menos equivalente» y se elimina la obligación del 70% en 2027. «Después de la experiencia adquirida durante el primer año de implementación del sistema de seguimiento de la superficie y de las dificultades expresadas por la comunidad de agricultores, los Estados miembros necesitan más flexibilidad en el uso y procesamiento de fotografías geoetiquetadas», reza el documento.

Esta es la última propuesta del Ejecutivo de la UE para calmar las quejas contra la carga administrativa de la PAC, una de las causas de las protestas de los agricultores. Se suponía que las fotografías geoetiquetadas facilitarían trabajo de los agricultores, pero el 26% de ellos admite que tiene dificultades para utilizarlas y la mitad no las usa.