Agentes de la Policía Local de Burgos detuvieron en la medianoche del pasado martes 15 de octubre a un hombre que poseía una orden de alejamiento activa de una mujer al sorprenderle junto a ella en el interior de un vehículo estacionado en la confluencia de las calles Marqués de Berlanga y Condes de Haro, con las puertas abiertas y música a todo volumen, según confirmaron fuentes municipales.
Las dotaciones policiales se personaron con motivo de un aviso recibido en el Servicio de Emergencia 1-1-2, donde se identificó a los ocupantes, un total de cuatro personas (dos varones y dos mujeres), momento en el que se comprobó que uno de ellos tenía en vigor una orden de alejamiento dictada por un juzgado de violencia de género, la cual le impedía aproximarse a menos de 200 metros de ella.
Días más tarde, el domingo 20, la Policía Local detuvo a otro varón, de 30 años, por un presunto caso de violencia de género en la calle José Zorrilla. Se da la circunstancia de que este joven tenía una reclamación policial motivada por una denuncia previa.