Un derbi, la guinda a un buen inicio

ROBERTO MENA / Burgos
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El Burgos quiere dedicarle hoy el triunfo a Appin -lesionado para toda la temporada- y podrá contar con Curro. El Mirandés, el equipo más sólido de la Liga, busca su primer triunfo a domicilio. Ambos vienen de perder y sueñan con ganar en El Plantío

Tras semanas ausente, el burgalesista Curro vuelve a la convocatoria. - Foto: Miguel Ángel Valdivielso

Llega el primer duelo burgalés de la temporada y, como es tradición, El Plantío será el escenario. A partir de las 18:30 horas el Burgos y el Mirandés se verán las caras a orillas del Arlanzón tras haber protagonizado un buen arranque de campaña que les mantiene en los puestos de privilegio de la tabla clasificatoria. Ganar el derbi sería para cualquiera de los dos la guinda a este exitoso comienzo. No hay un favorito claro, aunque serán los blanquinegros los que cuenten con la ventaja de jugar en casa. Desde que ambos se encuentran en el fútbol profesional los resultados tienen un claro color local, tanto en la capital como en Miranda de Ebro.

Los dos combinados vienen de perder en sus últimos compromisos ante equipos andaluces. El Burgos no pudo con el Almería pese a jugar durante 65 minutos con un jugador más, mientras que el Mirandés perdió su primer partido en casa ante el Granada. En ambos casos faltó acierto en el último tercio del campo y ninguno encontró el camino hacia el gol.

Se prevé un choque igualado en el que la ilusión y las ganas en ambos bandos serán notables, pero también el respeto. Es de esos encuentros que se quieren ganar a toda costa, pero que sobre todo no se quieren perder. En términos clasificatorios son tres puntos más, aunque en ambos vestuarios son conscientes de el choque tiene un valor añadido sobre todo para el entorno, por lo que el objetivo de Burgos y Mirandés es dar una alegría a su parroquia.

El conjunto capitalino ha añadido un motivo más para saltar al campo al máximo. La grave lesión de Kévin Appin -se rompió en Almería el ligamento cruzado anterior de su rodilla y se perderá toda la temporada- se ha convertido en un acicate para el vestuario burgalesista, que  se ha conjurado para dedicarle el triunfo al centrocampista de Martinica.

En Miranda continúan con el discurso prudente. Plantilla y cuerpo técnico tienen claro que cuentan con argumentos suficientes como para asaltar El Plantío, aunque recuerdan que  la salvación es el objetivo y que están por encima de las expectativas con las que comenzaron el curso.

La solidez es el principal aval de los rojillos, que son el equipo menos goleado de todo el fútbol profesional. Solo han encajado tres dianas, lo que deja claro el poder de contención de un grupo al que por contra le está costando ver portería -ha logrado cinco goles-.

Ambos entrenadores hablan del acierto y es que la puntería puede ser fundamental en un choque en el  las ocasiones pueden ser escasas.

Ha sido una de las incógnitas de la semana, aunque finalmente Curro Sánchez ha entrado en la convocatoria blanquinegra. No está claro que vaya a actuar de inicio, ya que lleva dos semanas trabajando al margen y se ha perdido los dos últimos encuentros ligueros. Se pierden el choque Álex Sancris, el blanquinegro más determinante en este inicio de campaña, Appin y López Pinto, todos ellos por lesión.

Por parte del Mirandés, Tachi, Hugo Rincón y Gorrotxategi han estado entre algodones toda la semana, pero se les espera en el once titular.

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