Después de 16 meses de atención a enfermos críticos por insuficiencia respiratoria grave, los intensivistas y enfermeras de Burgos hacen balance de lo vivido en el HUBU en el libro La UCI frente a la covid-19. Experiencia en la UCI del Hospital Universitario de Burgos, firmado por José Antonio Fernández Ratero, Sergio Andrés Ossa Echeverri y Miguel Martínez Barrios, que se presenta hoy en Cultural Cordón a las 20 horas en un acto que se plantea como un homenaje a los profesionales, los pacientes y sus familias al que asistirá la consejera de Sanidad.
Las enfermeras de la UCI Isabel González y Marta Gutiérrez presentarán el acto, que arrancará con la explicación del origen del proyecto, a cargo de Vegenat Healthcare, empresa que lo impulsa. Dará paso a las intervenciones de los doctores Martínez Barrios, que abordará La pandemia en imágenes: nuestros momentos; Ossa Echeverri, con Casuística de la UCI del HUBU: nuestros resultados; la supervisora de Enfermería, Celia Díaz Tobajas, que compartirá el papel de este colectivo; José Manuel Saiz Díez, que contará su experiencia como paciente en la UCI; Marta González Álvarez, que hará lo propio con la visión de las familias; y el jefe de la UCI, Fernández Ratero, que expondrá Necesidad de compartir lo vivido. Nuestro libro.
«Los enfermos se han sometido a la prueba más importante de sus vidas: la lucha contra una enfermedad aguda y muy debilitante que les ha hecho vulnerables y dependientes de cuidados médicos y de enfermería 24 horas al día y que han puesto a prueba a todo nuestro sistema sanitario, cuyo último eslabón son las unidades de cuidados intensivos», expone Fernández Ratero, quien hace extensivo este homenaje a sus familias, «que se han adaptado a una nueva forma de comunicación no presencial en muchos momentos, lo que a su vez ha supuesto un reto para los profesionales en el esfuerzo de transmitir optimismo, fuerza y ánimo en situaciones de alto riesgo vital».
Este homenaje abraza a los trabajadores de la UCI en representación de todas de España, «defensoras de un estilo de trabajo, un modelo integrado, participativo, humanista, vocacional, solidario, abnegado y, por supuesto, con altas cotas de nivel científico y técnico».