La panorámica de la ciudad que el valenciano Fernando Casanova pintó al óleo en tonos ocres -'Camino de Arcos'- preside la exposición que clausura la vigésimo séptima edición del Premio Diario de Burgos de Pintura Rápida, además del catálogo de la muestra. Esta pieza fue la ganadora del certamen, en el que solo en la categoría de adultos se presentaron más de 200 cuadros de entre los que el jurado seleccionó 40 finalistas. Todas pueden disfrutarse ahora (entre el viernes 13 y el domingo 22 de septiembre, de 9.30 a 19.00 horas y con entrada gratuita) en el Claustro Bajo de la Catedral, protagonista y también beneficiaria de esta iniciativa, porque desde sus orígenes ha recaudado fondos para la conservación del templo mediante la venta de las obras. Y, como novedad, con precios más económicos que otros años: las de mayor importe cuestan 900 euros.

La muestra se ha inaugurado esta tarde, en un acto que se ha hecho coincidir con la entrega de premios de una edición con "récord" de participantes, lo cual evidencia el prestigio del certamen cuyas riendas tomó Diario de Burgos en 2023, para hacerlo crecer este año con nuevos aliados en la organización: el Ayuntamiento y la Diputación de Burgos, así como las fundaciones La Caixa y Caja de Burgos. El director del periódico Álvaro Melcón, ha recordado y agradecido este respaldo, sin el que no habría sido posible incrementar el número de premios ni tampoco el importe de casi todos. «Se han repartido 18.000 euros en galardones; es el certamen mejor dotado de toda España en pintura rápida», ha dicho, apenas unos minutos antes de hacer entrega de los reconocimientos.

Las bases establecen que cada uno de los organizadores tiene la propiedad de un cuadro premiado, pero la fundación La Caixa ha donado el suyo, por lo que hasta el 22 de septiembre podrán comprarse 36 de las 40 piezas. Y, entre ellas, dos de las galardonadas: Arco de Santamaría, de Rafael Carrascal (cuarto premio), y Paseo de la Isla, de Juan Manuel Campos (quinto premio). Las dos se han tasado en 900 euros, que es el precio máximo de venta, porque, como también ha recordado Melcón, otro propósito de esta edición era ofrecer al público «arte de primera categoría a precios más asequibles». Y de esta manera, tratar de recaudar más para el emblema gótico burgalés.

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El presidente del Cabildo, Félix Castro, ha agradecido  el gesto y ha señalado que no consideran tan importante «la cuantía, como el cariño» de la organización del Premio y de los participantes, cada vez más. «Cientos de personas se congregan ese día alrededor de la Catedral y convierten el entorno en un gran taller de pintura», ha dicho, alabando la capacidad de los artistas para poner sobre un lienzo tantas y tan distintas perspectivas de la ciudad: «Su mirada es un reflejo de la nuestra».
También la alcaldesa, Cristina Ayala, ha manifestado su admiración por «el talento» de los participantes, que «nos abren ventanas al paisaje de Burgos, que es cultura y es industria a partes iguales». Y, en este sentido, ha agradecido especialmente a Casanova la elección de perspectiva, desde Arcos, «porque es más habitual que se pinten la Catedral y la ciudad desde el centro». Algo que el aludido, el ganador del concurso, sabía y de lo que trató de huir para, precisamente, diferenciarse de buena parte del resto de participantes.

El presidente de la Diputación, Borja Suárez, ha cerrado el turno de palabra destacando la importancia del Premio Diario de Burgos de Pintura Rápida como «carta de presentación» de la provincia fuera de sus límites, por lo que ha instado a seguir poniendo a la Catedral en el centro y a implicar a la ciudad en su conservación. «Cuidemos nuestra Catedral y aprovechémoslo, utilicemos este recurso, porque hace que muchos artistas acudan un día y que nos proyectemos después fuera con nuestra mejor tarjeta de visita», ha concluido.

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