Brasov es una ciudad enclavada en Transilvania, región en el centro de Rumanía famosa entre otros patrimonios por sus castillos, alguno de ellos asociado con la leyenda del conde Drácula. En esta urbe se encuentra el Tales of Communism Museum, que dirige desde hace una año y medio Alina Beteringhe, que antes de la pandemia regresó a su país natal desde EEUU, donde residió varios años. Ella es una de las 15 mujeres que participan en una experiencia de emprendimiento en Pradoluengo, donde llevan desde primeros de mes y permanecerán hasta el martes 24.

Como esta gestora museística, cuyo proyecto tiene también una vertiente social, el resto de féminas han encontrado su modelo empresarial o están en ese proceso de creación de sus propios proyectos de vida. Granjas ecológicas de kilómetro cero, creación de podcast de divulgación medioambiental, científica o artística, asistentes virtuales, empresas de representación de artistas, otra de enología y fabricación de artículos relacionadas con el mundo del vino, iniciativas de cosmética y sostenibilidad... son algunas de las iniciativas desarrolladas por este grupo de mujeres que durante estos días trabajan en acelerar sus proyectos y en la búsqueda de fórmulas de marketing para darles más visibilidad, atraer más clientes y mercados y para estar presentes en redes sociales con perfiles más atractivos. La globalización del mundo invita a ello y las experiencias compartidas en esta convivencia también enriquecerán cada negocio.

(El reportaje completo y testimonios de las protagonistas, en la edición impresa de este miércoles de Diario de Burgos o aquí)