La Asociación El Hombre y los Ingenios, de los hermanos Carlos y Carmelo Alonso Maté, ha conseguido una última prórroga -hasta el próximo 31 de diciembre del presente ejercicio- para mantener abierta la colección El Hombre y la Recolección. Esta muestra consta de más de 300 piezas y que exhiben desde hace ya doce años en el MUMO, el Museo de Modúbar de la Emparedada.

El Ayuntamiento de este municipio les notificó la pasada primavera que debían de abandonar la instalación el 15 de septiembre para poder dedicarla a otras necesidades de los vecinos. Sin embargo, finalmente atendió su petición de alargar la estancia y les ha permitido continuar hasta el último día del año de forma ya definitivamente improrrogable.

La colección sigue allí intacta, pero no se puede visitar a través del sistema de Museo Vivos, a cuya red pertenecía. Para poder hacerlo hay que solicitar cita previa con los promotores. Como explica Carlos, uno de los hermanos, ya han ido haciendo acopio de cajas para el traslado pero todavía no ha comenzado a empaquetar piezas porque quedan personas por verla.

Se refiere a los alcaldes de Aranda de Duero y de Briviesca, a quiénes se les ha mostrado el proyecto con intención de que lo acojan en sus localidades. También asegura que se lo ofreció a la regidora de Lerma, cuyos representantes municipales ya han estado en al menos dos ocasiones en el MUMO.

En este último caso, Carlos Alonso Maté afirma a este periódico que hay un interés que se diluye en la financiación del proyecto, principalmente en lo que afecta al espacio expositivo. «Si no nos queda más remedio tendremos que empezar a ofrecerla fuera de Burgos», comentaba el coleccionista, algo molesto porque desde la Diputación Provincial les hayan dejado fuera de una jornada de promotores culturales a la que no fueron invitados.

Los hermanos Alonso Maté confiesan que les gustaría poder estar en Modúbar de la Emparedada hasta encontrar un destino definitivo «para evitar hacer dos traslados, ya que se necesitan una decena de camiones y es costoso», pero el Ayuntamiento ha establecido como fecha límite el 31 de diciembre.

La alcaldesa, Sylvia Burgos, agradece la labor y la ilusión de los hermanos con su proyecto y les desea el mejor futuro, pero quiere disponer del local para comenzar a actuar en él y convertirlo en un espacio de artes escénicas para dar respuesta a las necesidades de un municipio que está creciendo mucho y que necesita de este tipo de instalación. Además de esa petición vecinal, tomó la decisión según indica por las bajas visitas que tenía este espacio expositivo.