El CD Mirandés mantiene muy vivo el sueño de luchar por todo en esta final de temporada. Quedan diez partidos y el cuadro rojillo se mantiene en plazas de ascenso directo a Primera División -es segundo a un punto del líder, el Levante de Julián Calero- y tiene ya ocho puntos de ventaja con respecto al séptimo clasificado cuando quedan 30 por disputar. Tiene cada vez más cerca asegurarse el play off.
Aprobó con nota el complicado reto de la última jornada y mandó a la lona a un rival directo como el Racing de Santander, además con remontada incluida. Las consecuencias de la batalla del sábado ante el cuadro cántabro han llegado en forma de sanciones y lesiones y a Alessio Lisci le tocará reestructurar su retaguardia la próxima jornada, ya que Unai Egiluz y Tachi vieron la quinta tarjeta amarilla del curso y serán sancionado mañana y Pablo Tomeo acabó tocado de un tobillo y es seria duda.
«Cero miedo a las bajas. El que tenga que jugar responderá. Como si tiene que hacerlo 'Pani' de central», señalaba Lisci tras el choque contra el Racing de Santander. El entrenador italiano confía plenamente en todos sus futbolistas y está convencido que su equipo mantendrá el nivel.
Existen varias opciones antes de que tenga que ser el máximo goleador del equipo el que actúe en el eje de la zaga. Si el preparador romano quiere mantener el dibujo, que parece lo más probable, Hugo Rincón podría jugar en el lugar que dejaría libre Tomeo, si no se recupera a tiempo. El jugador cedido por el Athletic ya ha actuado en esta posición alguna vez.
Además, están a disposición del cuerpo técnico Víctor Parada y Sergio Postigo (...).
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