El Juzgado de Violencia sobre la Mujer Nº1 de Burgos remitió a la Audiencia Provincial el auto en el que se acuerda la apertura de juicio oral contra Julián David Lázaro por la comisión del asesinato de Silvia Plaza, de 34 años, el 29 de abril de 2018. En el procedimiento también será juzgado por un delito de maltrato habitual y quebrantamiento de condena. Por todo ello, el Ministerio Fiscal pide 25 años de cárcel y una indemnización que roza los 150.000 euros para sus padres y hermanos, mientras que la acusación particular solicita 28 años de prisión y cantidades de hasta 180.000 euros en concepto de responsabilidad civil hacia sus familiares directos.
Según el relato de la Fiscalía, el acusado mantuvo una relación sentimental con Silvia Plaza desde 2015 hasta la fecha en la que ocurrieron los hechos e incluso llegaron a convivir en algunos momentos. Durante ese tiempo, manifestó una conducta «celosa y violenta» en la que ejercía un control sobre la víctima e incluso llamaba a su padre y amigos para conocer de su paradero y con quién estaba.
El 17 de octubre de 2017, Julián David la golpeó por diversas zonas del cuerpo y la localizó sangrando en la calle la Policía Nacional minutos después, por lo que fue trasladada al Hospital Universitario de Burgos.
Silvia interpuso denuncia por estos hechos al día siguiente, pero posteriormente no se ratificó. Meses más tarde, el 24 de marzo, acudió nuevamente al juzgado, lo que dio lugar a una sentencia condenatoria por delito de maltrato y quebrantamiento de medida cautelar. Julián David tenía una orden de prohibición de acercamiento a la víctima a una distancia de 300 metros de su domicilio, de su lugar de trabajo y de otros que podía frecuentar habitualmente.
Sin embargo, según señala el Ministerio Público, el acusado telefoneó en numerosas ocasiones a Silvia. De hecho, ambos mantuvieron contacto personal varias veces hasta el 28 de abril. Al día siguiente, después de pasar la tarde con unos amigos, Julián David llamó por teléfono a un conocido de ambos al que acusó de mantener relaciones sexuales con su expareja y quedando con él en la zona de las Bernardillas.
Acto seguido, y tras llamar a Silvia desde otro móvil para saber dónde estaba, el acusado y el conocido de ambos fueron hacia la zona de la Real y Antigua de Gamonal, pero se detuvieron nuevamente a discutir en la calle San Antón, justo en la esquina del Bar Las Candelas. Minutos después llegó la víctima y Julián David, «movido por los terribles celos», la propinó una paliza, provocándole heridas que le causaron la muerte al día siguiente. Un vecino presenció los hechos y vio cómo el agresor huía del lugar.
La Fiscalía pide 2 años de cárcel por un delito habitual de violencia de género, un año por quebrantamiento de condena y 22 por asesinato. Además, pide 51.141,60 euros para cada progenitor, 19.428 para cada uno de sus dos hermanos y 8.707 euros por el coste del funeral y gastos devengados del tratamiento y asistencia de Silvia en el Hospital Universitario de Burgos.
La acusación particular coincide en el relato de los hechos, pero solicita 25 años por asesinato y 3 por los otros dos delitos. Con respecto a las indemnizaciones, pide 70.400 euros para cada uno de sus padres por el perjuicio personal y patrimonial, y 15.000 para sus hermanos, lo que sumado a los gastos de funeral y asistencia sanitaria ascienden a un total de 179.507,37 euros.