El Ayuntamiento de Aranda de Duero tenía previsto comenzar a cobrar la tasa del agua a mediados de mayo, una vez que ya se han completado las lecturas de los contadores en abril. Esta labor llevaba sin efectuarse desde el cuarto trimestre de 2021 y ha generado un 'agujero' de unos 2,3 millones de euros en las arcas municipales. Sin embargo, al volcar los datos de estas lecturas en el sistema informático, se han detectado cerca de mil incidencias en un total de unos 18.000 padrones, lo que complica que se reactive el proceso de recaudación en este momento.
Tal como detalla el concejal de Hacienda del Consistorio arandino, Guillermo López, hasta que no solucionen estos errores no se emitirá la primera factura. "No queremos ni que la gente pague de más ni tampoco llenar el Ayuntamiento de reclamaciones porque no se ha hecho bien el trabajo. Eso no sería bueno ni para los trabajadores municipales ni tampoco para los ciudadanos. Hay que comprobarlo todo bien", remarca, mientras indica que se han localizado incidencias de varios tipos. Por ejemplo, con los contadores nuevos. "Si alguien se ha comprado una casa en enero de este año, llega el lector y toma nota del consumo de agua, esa cifra no se puede dividir en seis trimestres (los que están pendientes de pago) ya que en 2022 ese contador no existía. Ahí se genera un error porque sólo se tiene que cargar y cobrar en este último trimestre", explica López. Sucede algo similar con los contadores que 'dan la vuelta' al llegar al límite, como ocurre con el cuentakilómetros de una bicicleta. Pues bien, "el programa informático no está pensado para que los contadores den la vuelta". ¿Resultado? Hay consumos en valores negativos, "de -998".
También se han encontrado con casos de vecinos que tendrán que afrontar facturas de 5.000 euros por una fuga en sus casas. "Antes, esto se detectaba de un trimestre a otro. El problema es que el Ayuntamiento debe dar un servicio, pero dejó de hacer la lectura y no se han mirado los contadores en todo este tiempo", critica.
A juicio del concejal de Hacienda, todas estas complicaciones vienen "de haber parado las lecturas durante dos años" por parte del anterior equipo de gobierno. Ahora, el problema ha ido a más, pero López defiende que el dinero que está pendiente de cobrar "no se puede perder". Eso sí, su recaudación se llevará a cabo con garantías.
En este momento, varios departamentos municipales se encuentran trabajando en las posibles soluciones, desde Informática, a los trabajadores de Aguas y Gestión Tributaria, así como la empresa que se ocupa del sistema de contabilidad y la sede electrónica. "Cuando nosotros pasamos la lectura, la empresa lo carga y comprueba que no haya problemas. Quien valida que los datos son correctos es la aplicación. Subes un fichero y te detecta los errores", explica el edil.
Ante estas circunstancias, desde la Concejalía de Hacienda no tienen claro ni que la primera factura se pueda emitir a finales de este mes. La fecha exacta saldrá de las reuniones que mantendrán a lo largo de los próximos días. Como resume Guillermo López, "el sistema informático no está pensado para cargar tantos trimestres de golpe, sino para un uso continuado".
Calendario de recaudación. Una vez que se desatasque este asunto, los arandinos tendrán que pagar siete facturas del agua hasta final de año. Se abonarán mes a mes, salvo en agosto, con la idea de estar al día en abril de 2025.