La romería de la Virgen Blanca es ya una tradición en Burgos y la gente ya lo tiene apuntado en el calendario para acudir a un evento que reparte más de 5.000 raciones de paella y permite disfrutar de un día de convivencia junto a algunas peñas. En concreto han sido las de Los Gamones, La Alegría y San Pedro de la Fuente las agrupaciones que también han contribuido al ambiente festivo con la elaboración de pinchos.

En cuanto a la paella, todo el género necesario para su elaboración, ha vuelto a correr a cargo de Alcampo, que lleva ya 25 de los 30 años que se lleva organizando suministrando tanto arroz, como marisco y carne. Del ingrediente esencial se han aportado 400 kilos y el resto han sumado cerca de 500. Su directora en Burgos, Carmen Odilón, ha comentado que "es un día que tenemos marcado en el calendario y cada vez más gente de la empresa se anima a venir". 

El evento comenzó a las 12, con la subida de la virgen a la campa de Nuestra Señora de la Blanca, junto al Castillo, donde se celebró una misa y bailaron los grupos de Nuestra Señora de las Nieves y María Ángeles Saiz. A partir de ahí los cientos de personas que acudieron buscaron una sombra para poder comer tranquilamente.