Llega la Navidad y con ello los talleres entran de lleno en una de las épocas del calendario con mayor actividad. A la demanda provocada por las averías y los golpes se une las citas solicitadas por los conductores que quieren tener sus vehículos a punto para realizar con las mayores garantías los desplazamientos programados a lo largo de los días de fiesta. Y es en estos picos de mayor demanda cuando más se evidencian los problemas que arrastra este sector profesional en toda España.
Aún sin riesgo de entrar en una situación de colapso, la provincia de Burgos no es ajena a las delicadas circunstancias que afectan en mayor o menor medida a otros puntos del país. Eso se traduce en un aumento en una lista de espera que amplía y reduce los plazos para tramitar las citas en función de la demanda del momento y de las circunstancias de cada negocio.
Una dinámica compleja que se enrevesará más si no se atienden pronto las reivindicaciones de los profesionales, como es la flexibilidad en la contratación de trabajadores extranjeros. El sector asume que esta situación tenderá a prolongarse si no se sientan las bases de un cambio y con ello se corre el riesgo de que el problema se cronifique debido a la falta de personal y de relevo generacional. «Todo eso genera un caldo de cultivo para que no se puedan atender los trabajos y el que tenga la expectativa de disfrutar de una atención rápida por necesidad se las ve y se las desea», explica el secretario general de la patronal Adeabur, Gabriel Martínez.
Los representantes de los talleres asumen que en estas semanas muchos negocios se ven «desbordados» para atender la demanda acumulada. La media de espera para reservar una cita de mecánica se sitúa en los dos meses en muchos casos y en algunos locales especializados en el trabajo de la chapa y pintura el margen es aún superior. «Es algo que se está viendo desde verano», explica Martínez, quien advierte de los «problemas» que pueden surgir en los próximos días para atender ciertos tipos de averías.
La situación se encuentra en un punto tan complejo en el que ciertos perfiles profesionales se han visto obligados a cerrar de forma temporal la atención al público a lo largo de este mes de diciembre para sacar adelante el volumen de trabajo pendiente y los encargos más urgentes.También hay talleres propios cuyos titulares se dedican a estas tareas durante el fin de semana para tener trabajo adelantado.
(Más información, en la edición impresa de este domingo de Diario de Burgos o aquí)