El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias, propietario de la estación Burgos Rosa Manzano, ya trabaja en dos soluciones para detener las goteras que han vuelto a aparecer en la terminal.

La causa de las mismas, tal y como aseguran desde el organismo público, es completamente ajena a la reparación de la cubierta ejecutada hace un año.

Dicho proyecto no contempló actuación alguna sobre los exutorios, las compuertas de rejilla con apertura para evacuación de humos en caso de incendio, que es donde se encuentra el problema.

De este modo, se estudia implementar juntas de goma en las láminas de las rejillas de estos exutorios para evitar las filtraciones. También se baraja instalar unas cubiertas sobre estas salidas para protegerlas del impacto directo de la lluvia y el viento.

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