La rehabilitación del Centro Cívico Virgen de las Viñas para acoger el campus de la UBU en Aranda reserva la primera planta del edificio para los estudios de Enfermería prometidos para estrenar esta oferta de formación superior en la capital ribereña, para dejar la segunda planta para la UNED y la planta baja para la Escuela de Hostelería, la cafetería abierta al exterior y los estudios de la radio comunitaria. El reparto de estos espacios se ha hecho en función de las necesidades de cada una de estas ofertas formativas.

En lo que será la planta reservada a la UBU se van a crear cinco aulas para 25 personas, otras dos para 50 y un aula polivalente con capacidad para 160 alumnos. El proyecto refleja también el espacio para habilitar dos laboratorios y un centro de simulación, que recreará una habitación de hospital, una consulta y una sala de observación. Además, se ha contemplado la creación de una sala de profesores y dos despachos de tutorías, además de espacios para trabajo en grupo.

Algunas salas, como la biblioteca que se creará en la segunda planta, serán compartidas por el Grado y Máster de Enfermería y los alumnos de la UNED, que tendrán también en esa planta reservada para la formación a distancia un aula para 20 personas, otras para cinco, junto a dos despachos para profesores y una oficina para el personal.

El campus de la UBU en Aranda de Duero tendrá 8 aulas, 2 laboratorios y un centro de simulación. - Foto: Meta + Bher

En la planta baja, la Escuela de Hostelería sufrirá algunas mejoras en la distribución de espacios y sumará la cafetería, donde los alumnos podrán hacer prácticas y que estará abierta tanto a los que acudan a cualquiera de estas instalaciones como al público en general. En esta cota cero del nuevo edificio también se instalará Radio Iris 7, que compartirá una sala de formación con la Escuela de Hostelería.

El proyecto incluye también una intervención en el pabellón deportivo, que se abrirá al espacio verde que se quiere poner en valor en la zona norte del inmueble, que ahora está infrautilizado y descuidado.

El diseño del nuevo edificio persigue tener «un consumo de energía casi nulo», como destaca el proyecto, con medidas como la colocación de vegetación en la galería de la fachada sur y en varias cubiertas para reducir el calentamiento del inmueble, o la sombra que aportarán los grandes aleros. También se va a dotar a las instalaciones de un depósito para recuperar el agua de lluvia y placas solares para minimizar el consumo eléctrico.

La materialización de este proyecto ha salido a licitación por 6,8 millones de euros y con un plazo de ejecución de 14 meses. El concurso se tramita por procedimiento urgente y, por lo tanto, las empresas interesadas tienen hasta el día 21 para presentar sus ofertas.