Que a nadie lleve a engaño su irreverente juventud y el aire como ausente y tranquilo que desprende: el burgalés Álvaro G.Zorrilla es un fiera, un talento que se rifan aquí y allá directores y productores de cine. Este chaval de Barcina del Barco, pueblo ubicado en el Valle de Tobalina, es diseñador y editor de sonido. Ha trabajado para series españolas tan exitosas como La casa de papel (en cuatro de sus temporadas, las más potentes), Vis a Vis o El internado: Las cumbres, así como para otras internacionales -producciones de Dubai, Líbano o China-, su trabajo puede verse en las plataformas de streaming más afamadas: Netflix, HBO,Amazon,A3Media... Desde su estudio en una preciosa casa de Barcina del Barco, hace magia para que todos los proyectos en los que toma parten suenen a música celestial. «Desde aquí puedo trabajar para cualquier empresa», afirma mientras se coloca unos auriculares, enciende pantallas y activa todos los altavoces que tiene en su guarida, que parece el reducto de un técnico de Hollywood.
Aunque se matriculó en un grado de ingeniería electrónica en Burgos, pronto vio que aquello no era lo suyo, y en ese trance conoció a José Ignacio Arrufat, diseñador de sonido que pronto se convertiría en su jefe y mentor, con quien trabajó en varias series, entre ellas La casa de papel.
Estuvo durante dos años viviendo y trabajando en Madrid, y ahora lo hace desde su pueblo como autónomo para dos de las productoras de sonido más importantes de España -Milciclos, de Madrid, y Coser y Cantar, de Barcelona-. «Siempre me atrajo el sonido, la importancia que tiene en una producción cinematográfica. Y también la creación», explica en referencia a que está rematando ahora un proyecto personal: la confección de un cortometraje de ficción del que es director, guionista y, claro, diseñador de sonido. Se llama Sin salida, lo ha rodado íntegramente en la comarca en la que vive y con él concursará en la Seminci (Semana Internacional de Cine de Valladolid).
Ya hizo sus pinitos detrás de la cámara hace unos años, rodando en la bella localidad de Herrán su primer corto, No mires atrás, más pensando en publicitar este recóndito paraíso natural. Pero 'Sin salida' es otra cosa: ha puesto en el proyecto todo su saber hacer y toda la ambición. «Lo hemos grabado en dos veranos y un invierno. Casi tres años». 'Sin salida', al que le está dando los últimos retoques, está rodado en Pedrosa de Tobalina (donde se sitúa el maravilloso salto del Jerea), en Plágaro, uno de los pueblos deshabitados del valle, y en Barcina del Barco. Aunque se ha prolongado en el tiempo, está satisfecho con el resultado.Además, el azar contribuyó a darle aún más empaque: durante uno de los días de rodaje en invierno, cayó una copiosa nevada.«Fue algo mágico», asegura Zorrilla.
El cortometraje que competirá la Seminci (puede verse el tráiler en Youtube) es un intenso thriller: narra la historia de un tipo que aparece un día encerrado en el maletero de un coche estacionado al sol en un pueblo abandonado. «Todo el corto es una olla a presión.Muy loco. Pero es una historia a la que he dado muchas vueltas para que estuviera bien hilada», advierte Zorrilla. «Aunque está hecho con medios muy limitados, parece grande por los escenarios, por la música, por el sonido. En este trabajo se muestra muy bien cómo el sonido puede engrandecer una historia. Es un personaje más de la misma. Y uno fundamental», señala. Confiesa que ponerse detrás de una cámara es algo especial. «Crear algo desde cero es complicado, pero también un reto, un desafío». Tiene buenos maestros, como el director de La casa de papel, Jesús Colmenar, que le ha asesorado para este trabajo. «Creo que ha quedado una historia muy potente», admite.
Se muestra esperanzado con este corto que protagonizan los actores también burgaleses Juan Roca y Eduardo Ruiz, y sueña con realizar algún un día un largometraje, pero no le sobra precisamente el tiempo: está inmerso en diferentes proyectos. Aunque por una cuestión de confidencialidad no puede revelarlo todavía, uno de los más inmediatos pasa por ponerse, a partir del mes de octubre, a las órdenes de uno de los directores de cine español más reconocidos internacionalmente.«Es mi director español favorito.Estoy muy ilusionado». En el estudio que posee Álvaro G.Zorrilla hay referencias cinematográficas -un cartel de La casa de papel, la claqueta con la que ha trabajado para 'Sin salida', una estrella que recuerda a las que se estampan en el famoso paseo de Los Ángeles- y un orden escrupuloso.
Cuando hace sonar su equipo, este espacio permite transportar a cualquiera que lo escuche allá donde él quiera: al fondo de un río, a la copa de un árbol, al vuelo de los pájaros, a un campanario, al fragor de una batalla, a la angustia de un encierro e incluso al silencio... «El cerebro a veces se olvida del sonido cuando estamos viendo una película o una serie, pero es fundamental.Es el sonido el que da la fuerza a las imágenes», concluye.