La concejala del PSOE y edil de Servicios Sociales durante el pasado mandato, Sonia Rodríguez, ha hecho un llamamiento al vicealcalde, Fernando Martínez-Acitores, para que no ceda a las presiones de su partido y olvide la idea de presentar una alegación al Presupuesto de 2024 para recortar en un 50% la partida de las ayudas que el Ayuntamiento concede para cooperación al desarrollo. La edil entiende que solo un toque de atención de su partido explica que el viernes se aprobara el Presupuesto, en el que se mantenían las subvenciones a las entidades que realizan proyectos de cooperación internacional y que apenas tres días después anuncien una enmienda a sus propias cuentas.
Rodríguez, además, ha acusado a Martínez-Acitores de "mentir" a los ciudadanos al asegurar que las partidas destinadas a cooperación no se ejecutaban y al afirmar que era precisamente la cantidad sobrante la que se quiere retirar del Presupuesto. La edil socialista ha recordado que el pasado 29 de diciembre se celebró un consejo de la Gerencia de Servicios Sociales en el que el líder de Vox en el Ayuntamiento votó a favor de conceder unas ayudas, en régimen de concurrencia competitiva, por valor de 791.000 euros. Es decir, de una convocataria en la que se agotó todo el dinero que se había reservado para esta línea y desarrollará acciones en países como el Congo, Bolivia, Guatemala, El Salvador... De hecho, ha detallado que incluso se felicitó al vicealcalde ya que Vox siempre había votado, durante los últimos cuatro años, en contra de estas subvenciones.
La edil socialista ha querido echar un capote a Martínez-Acitores al afirmar que quizá había confundido las cantidades no ejecutadas con los presupuestos de los años 2020 y 2021 ya que la pandemia impidió el desarrollo de muchos estos proyectos. Incluso con algunos problemas puntuales y excepcionales con algunos convenios como los firmados con San José de Apartadó o con la Asociación de Amigos del Pueblo Saharaui. En el primero de estos dos últimos casos porque ellos mismos pidieron que se les redujera la subvención.
Rodríguez se ha preguntado cómo es posible que el Ayuntamiento se haya gastado dos millones de euros en tres semanas para bonos al consumo y ahora sea capaz de eliminar unas ayudas con las que se consigue que personas en países subdesarrollados o en vías de desarrollo puedan tener acceso a agua potable o se beneficien de programas educativos para niños, de seguridad alimentaria, para la autonomía económica de la mujer...
Ha recordado que la solidaridad de la ciudad de Burgos siempre ha sido ejemplar y ha comenzando destacando el papel que los misiones burgaleses han desempeñado en países del tercer mundo. De la misma manera ha reiterado que la ayuda a la cooperación por parte del Ayuntamiento de Burgos existe desde 1993 (se han cumplido ya 30 años) y entre 1995 y 2011 se destinaba a estos proyectos el 0,7% del Presupuesto. Incluso en los años 2000 y 2010, con los exalcaldes Ángel Olivares (PSOE) y Juan Carlos Aparicio (PP) se superó el 1%.
La edil ha tildado de "sainete" y la posición del bipartito ya que también ha recriminado que el PP, en otros tiempos defensor a ultranza de estas subvenciones, no vaya a mover un dedo para mantenerlas.