El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, ha alertado este martes de que las Fuerzas Armadas de Rusia han lanzado durante la pasada noche más de 180 drones, una cifra récord que, según el mandatario, evidencia que el Kremlin está logrando con éxito evadir las sanciones.
"Anoche Rusia atacó a Ucrania y lanzó un número récord de drones contra nuestro pueblo, 188", ha contado el mandatario ucraniano a través de sus redes sociales, compartiendo imágenes de los bomberos trabajando para sofocar los incendios que provocaron los proyectiles en ciudades como, por ejemplo, Ternópil.
Zelenski ha destacado que a pesar de que los sistemas de defensa aérea lograron neutralizar un gran número de estos drones, muchas instalaciones e infraestructuras han quedado dañadas tras esta nueva ofensiva del Ejército ruso.
Asimismo, el presidente ucraniano ha puesto el foco en las decenas de "componentes extraños" que contienen estos 188 drones. "Son casi 16.000 componentes sin los cuales no volarían", ha dicho, alertando de que estos ataques "sólo son posibles" gracias al esquema que Rusia ha tejido para eludir las sanciones.
"Gracias a todos los que en el mundo están bloqueando esos suministros, pero necesitamos trabajar más de manera conjunta para que las sanciones funcionen y obligar a Rusia a detener esta guerra", ha enfatizado Zelenski.
"Si uno está en contra de la guerra, debe estar realmente en contra de que Rusia eluda las sanciones", ha añadido, en alusión a los países que han expresado su rechazo al conflicto, pero que han optado por no sumarse a las sanciones que llegan principalmente de los países de la OTAN.
Desde última hora de la tarde de este lunes, cerca de 200 proyectiles han estado sobrevolando territorio ucraniano en respuesta a los ataques de Kiev con misiles de largo alcance de los últimos días. A los 188 drones se les sumó cuatro misiles balísticos Iskander-M lanzados desde Vorónezh y Kursk.
Por otro lado, Zelenski ha informado de la muerte de dos personas después de que un ataque ruso golpeara un taller de reparación de automóviles en Sumi, una región cercana --apenas a unos 30 kilómetros-- a la disputada provincia rusa de Kursk.
Zelenski ha insistido en que "la única manera" de defenderse de estos ataques es destruyendo las posiciones dentro del territorio ruso desde donde son lanzados, en clara alusión al reciente permiso concedido por sus socios para utilizar sus armamento de largo alcance contra estos espacios.
"Por eso la capacidad de atacar territorio ruso es tan crucial para nosotros. Es la única manera eficaz de limitar el terrorismo de Rusia y, en última instancia, su capacidad de hacer la guerra", ha dicho el mandatario ucraniano en X.
Rusia registra otros dos ataques ucranianos con ATACMS
Por su parte, Rusia reconoció hoy otros dos ataques ucranianos con misiles estadounidenses ATACMS contra la región de Kursk tras el lanzamiento la pasada semana del misil hipersónico ruso Oréshnik contra Ucrania.
"Según datos confirmados, en los últimos tres días las Fuerzas Armadas de Ucrania han llevado a cabo dos ataques con armas occidentales de largo alcance contra objetivos en la región de Kursk", declaró el Ministerio Defensa de Rusia.
El comunicado castrense precisó que durante la inspección de los lugares atacados se confirmó de manera fehaciente que las Fuerzas Armadas de Ucrania emplearon misiles tácticos ATACMS producidos en Estados Unidos.
"El Ministerio de Defensa de Rusia controla la situación. Se preparan acciones de respuesta", indica la nota.
El mando militar ruso precisó que este sábado Kiev atacó con cinco misiles ATACMS las posiciones de una división de misiles antiaéreos S-400 junto a la localidad de Lotariovka, 37 kilometros al noroeste de Kursk, la capital de la región homónima, que ya había sido atacada hace una semana con misiles británicos Storm Shadow.
De esos cinco misiles, dos alcanzaron su objetivo y causaron daños a un radar y dejaron heridos entre el personal militar.
Y este lunes, añadió Defensa, las Fuerzas Armadas de Ucrania lanzaron ocho ATACMS contra el aeródromo Kursk-Vostoch, siete de los cuales fueron interceptados y destruidos por las defensas antiaéreas.
En este ataque, sólo un ATACMS alcanzó su objetivo causando "daños menores" en la infraestructura aeroportuaria y dejando dos heridos leves.
Ucrania, que había lanzado su primer ataque el 19 de noviembre contra la región vecina de Briansk, decidió continuar sus ataques con misiles de largo alcance contra territorio ruso pese al lanzamiento el jueves pasado del misil Oréshnik contra una fábrica de armamento en la región ucraniana de Dnipró.
El presidente ruso, Vladímir Putin, amenazó a Kiev con nuevos ataques con misiles de nueva generación en caso de que reincidiera en sus lanzamientos contra territorio ruso.