Burgos se juega 206 millones en la nueva era Trump

G. ARCE / Burgos
-

EEUU está entre los diez mercados preferentes de la economía local. Más proteccionismo y aranceles condicionarán una balanza comercial de más de 6.500 millones de euros

El sector del vino fue el principal damnificado por las políticas proteccionistas impuestas por Trump en su anterior mandato en la Casa Blanca. - Foto: Brian Snyder

La vuelta de Donald Trump a la Casa Blanca alteró ayer el desayuno a una parte importante de las empresas burgalesas cuyos balances y actividad dependen del mercado internacional. Y es que volver a las políticas de aranceles y el proteccionismo extremo y antojadizo que vaticina el futuro y reincidente presidente de los Estados Unidos preocupa -y mucho- en una economía que cada año mueve más de 6.500 millones de euros por el mundo, en exportaciones e importaciones.

Horas después de conocer que el singular magnate repetía en el cargo, nadie se atrevía a vaticinar qué es lo que depararán los próximos años, al igual que nadie pensaba que un personaje con tan rico historial judicial acabase repitiendo en el cargo con más poder y responsabilidad en la Tierra y, además, con un amplio respaldo electoral.

De entrada, los mercados financieros estadounidenses recibieron bien la noticia -ya la estaban anticipando- y en muchos despachos ya se daba como más que probable una nueva etapa Trump.

Burgos, lógicamente, no es ajeno al devenir de la primera potencia mundial -y, como tal, determinante en la evolución económica global-, pero Estados Unidos no es su primer socio comercial directo. Más del 60% de las compras y ventas que realiza la economía local es con sus socios europeos, con Francia a la cabeza, por lo que habrá que observar muy estrechamente cómo evolucionan las relaciones comerciales entre Washington y Bruselas en los próximos años.

En la balanza comercial local, el país de Trump se mueve entre los  diez mercados más importantes de Burgos. El pasado ejercicio, por tomar una referencia, hubo intercambios por valor de 206 millones de euros. Estamos ante el noveno mercado de exportación, en el que destacan los aceites esenciales y la perfumería, la maquinaria y aparatos mecánicos, las fundiciones de hierro y acero y el vino, que genera más de 6,8 millones en ventas.

En el capítulo importador, del otro lado del Atlántico compramos productos farmacéuticos, principalmente, automóviles, armas, perfumería y materiales plásticos.

Pero, por encima de estos números, preocupa el endurecimiento de las relaciones USA-China y el rebote en el incremento de los aranceles y de los costes que supondrá para el resto del mundo. Entre las propuestas políticas más destacadas de Trump se encuentra su apoyo a aranceles generales del 60% a las importaciones chinas y del 10% a todas las demás importaciones.

China es, tras los principales socios europeos y Gran Bretaña, el primer mercado de Burgos y sus 280 millones en compras y ventas llegan a todos los sectores y son claves en la mayoría de ellos. La crisis del porcino, desatada tras el aumento de los aranceles a los vehículos eléctricos chinos por parte de Europa, prueba que si el gigante asiático quiere, puede poner las cosas difíciles, también a Burgos.

(Más información, en la edición impresa de este jueves de Diario de Burgos o aquí)