Julián Calero ha calificado al Real Zaragoza como uno de los "grandes" de la categoría "y los equipos grandes se revuelven", en clara alusión a los problemas de resultados del equipo maño. "No vamos a pensar mucho en sus circunstancias y sí en las nuestras. Tenemos que manejar nuestras virtudes y competir. Con Escribá han cambiado bastante, con buenos resultados hasta estas dos últimas jornadas. Con los jugadores que tiene, con esa afición, esa ciudad, está llamado a estar arriba".
El técnico no podrá contar para esta cita con Elgezabal, sancionado; y Grego Sierra y Castel, lesionados. Pese a ello ha asegurado que el resto de la plantilla "está preparada y al que le toque competir lo hará bien". Ha recordado, además, que en las 28 jornadas disputadas "hemos tenido opciones de ganar o puntuar y tenemos la ambición de querer más". En este sentido, no cree que sea necesario cambiar el discurso cuando el Burgos llegue a los 50 puntos y haya asegurado la permanencia. "Lo primero es llegar a esos 50 puntos. La mejor forma de cambiar la mentalidad es no cambiarla. Si algo no funciona no lo cambies, mejóralo".
Calero ha defendido su estilo de juego y ha asegurado que el Burgos no lo va a cambiar "mientras yo esté aquí". "Tenemos nuestras armas y este equipo no va a jugar como el Barcelona de Guardiola. Creemos en lo que hacemos".
El entrenador del Burgos también ha hablado sobre las negociaciones para renovar su contrato y ha sido muy claro: "Es muy pronto". "Calero es lo menos importante, lo importante es el Burgos. Michu y yo hablamos todas las semanas, la hoja de ruta es muy clara. Yo estoy muy feliz en Burgos, me siento muy querido, reforzado. Hemos hablado y creo que hay que tener calma, tranquilidad".