El Gobierno regional y el central ya se preparan para poner sobre la mesa planes de ayuda para los municipios afectados por la nueva oleada de incendios forestales que están arrasando el oeste y el sur de Castilla y León durante las últimas jornadas. El consejero de Economía,Carlos Fernández Carriedo, por una parte, y la delegada del Gobierno, Virginia Barcones, avanzaron ayer que ambos ejecutivos, aunque por separado, ya están trabajando en planes y programas como los que presentaron recientemente para reconstruir la Sierra de la Culebra (Zamora), tras el incendio que se llevó por delante 25.000 hectáreas.

El consejero regional aseguró que el ente autonómico ya estudia como desplegar ayudas para las zonas más afectadas por los fuegos forestales en la Comunidad a fin de «impulsar cuanto antes su actividad productiva», además de «compensar los costes» ocasionados por la acción de las llamas. Según explicó, el problema de los incendios  está afectando a toda España, pero «de forma particularmente intensa a esta comunidad autónoma». En este punto, Carriedo defendió la petición de este martes del máximo dirigente regional, Alfonso Fernández Mañueco, de «abrir un amplio debate, incluso en la Conferencia de Presidentes», para abordar este «nuevo reto de futuro», en lo que supone un escenario que «seguramente se va a vivir con intensidad también en los próximos años».  

Compromiso

«La declaración de zona catastrófica se por supuesta y por descontada», reconoció por su parte la delegada del Gobierno, en referencia a la petición de este martes del presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, en este sentido para las comarcas que se han visto afectadas por los incendios forestales en la Comunidad. Virginia Barcones, que presidió en Tordesillas (Valladolid) una Comisión de Asistencia, garantizó la ayuda del Gobierno para recuperar las zonas afectadas, tanto en lo forestal, como en términos hidrológicos, así como para que la población cuente con lo necesario para que pueda continuar con su vida.

La delegada aseguró que el Gobierno está demostrando «compromiso y responsabilidad» a la hora de combatir las llamas y mitigar sus efectos. Según detalló, el Ejecutivo central está «volcado» en ayudar a la Junta, la administración que recordó es competente desde 1984 en materia de prevención y extinción de incendios. «El Estado está haciendo todo lo que está en su mano para ayudar a apagarlos», añadió Barcones, que insistió en que «por desgracia» cada vez son «mas devastadores».

Es por ello que manifestó que es una «prioridad absoluta» evitar que se conviertan en catástrofes de gran magnitud, algo que insistió ya se demostró el año pasado después de lo ocurrido con el incendio de la Sierra de la Paramera, en Ávila

Por último, la delegada del Gobierno defendió la importancia de la colaboración institucional, que definió como que los ciudadanos les vean «trabajar unidos». Así, aunque los trabajos de prevención y extinción de incendios son una materia de la Junta, apostó por la cooperación para ser «mas fuertes» y dar una mejor respuesta.