La Unión Europea no ha rectificado su planteamiento inicial y mantiene a la terminal ferroviaria de mercancías de Villafría en un rango inferior al de Valladolid, León o Vitoria. El Parlamento Europeo y el Consejo de la Unión Europea dieron a última hora del lunes luz verde a un acuerdo político que aprueba, de manera todavía provisional, la revisión del Reglamento de la Red Transeuropea de Transporte (RTE-T).

El documento que hizo público ayer la Comisión Europea no arroja novedad alguna para los intereses de la provincia, que continuará como un mero punto de paso de los trenes y contenedores que transiten por las vías del Corredor Atlántico de norte a sur del continente. La inacción por parte de los sucesivos Gobiernos desde 2013, cuando se redefinió este mapa y se fijaron los nueve corredores que vertebrarán toda la Unión Europea, provocará que Villafría siga ostentando la categoría de nodo global (comprehensive network).

Aunque este hecho sí que avalará la llegada de inversiones procedentes de Bruselas a la estación burgalesa, le impedirá no obstante adquirir el rango a nivel logístico que sí tomarán plazas como León, Vitoria o Valladolid, esta última en plena fase de construcción. Todas ellas alcanzarán el estatus de nodo básico (core network), ostentando una relevancia a todas luces muy superior a la de Burgos y recabando muchos más millones que los nodos globales.

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