Hay algunas inversiones que tardan en materializarse más de lo esperado, como la del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) para mejorar los accesos de la estación de trenes de Miranda. Allá por el primer trimestre de 2022, la entidad vinculada al Ministerio de Transportes empezó a dar forma a esta propuesta, aunque no contó con el diseño concreto hasta octubre de ese año y, finalmente, la licitación de las obras se terminó demorando hasta febrero del presente ejercicio. El procedimiento para adjudicarlo siguió su curso y se recibieron cuatro ofertas, pero después la tramitación se quedó varada al llegar la hora de evaluarlas. Y así ha permanecido durante casi ocho meses, hasta que se han adjudicado las tareas por 1,7 millones de euros.
Según transmiten desde Adif, la empresa Seranco se encargará de ejecutar estas labores. Eso sí, dentro de las ofertas que se presentaron en primavera de este año había otra más económica.Se trataba de la propuesta emitida por Cotodisa Obras y Servicios, aunque tan solo rebajaba la cuantía de la adjudicataria en un 1,3% y además en el resto de criterios técnicos había obtenido una puntuación ligeramente inferior. De una forma u otra, el fin del procedimiento de contratación con esa cuantía supondrá una reducción de 200.000 euros en la inversión prevista por la entidad pública en un principio.
El objetivo que persigue Adif con esta intervención pasa, en líneas generales, por «reforzar la accesibilidad y mejorar el servicio a los usuarios de la estación mirandesa». De forma un poco más concreto, la entidad aclara que una de las principales tareas consistirá en la instalación de un tercer ascensor, «en el andén central frente a las vías 1 y 2». Precisamente, en ese pavimento se llevará a cabo una «remodelación» para recrecerlo, renovar el firme, cambiar la iluminación e instalar en el suelo «encaminamientos podotáctiles para facilitar la orientación de personas de baja visibilidad». Los trabajos se realizarán respetando algunas estructuras de la histórica instalación de la ciudad del Ebro, como la marquesina que se sitúa en esa zona.De hecho, desde el ente promotor de la obra explican que se procederá a la «rehabilitación y acondicionamiento» de esa tejavana «para garantizar su preservación».
Las mejoras en materia de accesibilidad, que permitirán que se dejen de utilizar los pasos a pie de vía, también se extenderán hacia otros puntos. Por ejemplo, desde Adif adelantan que se hará una «prolongación» del espacio peatonal de la vía 4, que ganará 50 metros «hacia el lado Madrid, sustituyendo la plataforma existente» por una estructura «con pavimento de adoquín de hormigón». Ese mismo andén, siempre según el ente público, «se recrecerá en altura para facilitar la subida y bajada de viajeros y se mejorará su iluminación». Algo similar ocurrirá con la zona de espera que se encuentra en la vía 6, puesto que se estirará hacia el sur.
Dirección de obra. Al sinfín de actuaciones anteriores se suman otras de menor calado, ya que, conforme a la descripción que realizan en Adif, también se llevará a cabo la «renovación y mejora de señalética e iluminación». Es decir, el proyecto que acaba de adjudicar la entidad incluye una gran cantidad de detalles y, por eso mismo, también ha destinado un presupuesto importante a la dirección de la obra. En concreto, durante el mes de noviembre se adjudicó el control de los trabajos a la UTE Gestión INT Suelo - Extremera LED por un total cercano a los 240.000 euros. Estas labores para revisar la ejecución de la reforma durarán como máximo 15 meses, mientras que las obras como tal se extenderán a lo largo de 11 meses.