Transportes no da fechas de nuevas obras en la A-12

I.E. / Burgos
-

El Ministerio ignora cuándo concluirán los trabajos del tramo pegado a La Rioja, que ya debería haberse estrenado. Dice que avanza en el resto de proyectos

Apenas hay máquinas trabajando en el tramo entre Villamayor del Río y La Rioja. - Foto: Valdivielso

Todo lo que ocurre en torno a la A-12 constituye un auténtico misterio. Las obras que están en marcha ni se sabe cuándo terminarán, pese a que deberían estar concluidas desde hace año y medio. Y sobre los tramos en los que aún no se ha movido ninguna piedra el secretismo de Transportes es aún más preocupante. Hace pocas fechas, en una respuesta parlamentaria a los senadores del PP Javier Lacalle, Salvador de Foronda y Raquel González informaba, de manera muy escueta, de que «se está trabajando en los proyectos que faltan» y que «las obras irán avanzando según la disponibilidad presupuestaria».

La contestación no dice nada pero al mismo tiempo dice mucho. En concreto, que el Ministerio que dirige Óscar Puente ignora cuándo  se licitarán los trabajos de los tres  trayectos que quedan por construir y que su ritmo dependerá de que haya partida en los Presupuestos Generales del Estado. Los de 2024 están prorrogados, de manera que hay que irse a los de 2023. Y en esos Transportes reservó partida económica tanto para 2024 (30,4 millones) como para el ejercicio siguiente (19,1 millones), pero solo para el tramo entre Villamayor del Río y La Rioja. No hay consignado más dinero para la Autovía de Logroño, de manera que no se esperan nuevas obras hasta dentro de unos cuantos años. ¿Cuántos? Imposible saberlo, porque el departamento rehúsa contestar a otra cuestión que le planteaban los parlamentarios populares burgaleses, quienes  se interesaron por el cronograma que contempla el Ministerio para concluir toda la autovía.

Si hay que fiarse de Puente, el tramo entre Burgos capital e Ibeas empezará a ejecutarse en 2025. Así lo aseguró el 31 de mayo pasado. Para eso tiene que someter a información  pública la actualización del proyecto, que dijo que se hará «de inmediato». Hay que recordar que fue en 2016 cuando Fomento adjudicó su construcción a la UTE formada por Joca y Ocide, que deberían haber terminado en 2019. Pero desde el principio pidieron un modificado millonario y no movieron prácticamente ni una máquina.

En cuanto al trayecto que conecta Ibeas de Juarros con Villafranca Montes de Oca, su futuro es otra incógnita. Su proyecto se ha tirado 8 años guardado en un cajón del Ministerio, sin ser licitado para su ejecución. Por tanto, ha sido necesaria una actualización que, por lo pronto, ha revelado que las obras se encarecerán en 90 millones, hasta los 246.  Pero nada se sabe sobre cuándo saldrá a concurso la construcción de un trayecto de 23,5 kilómetros, el más complejo de la autovía, puesto que es el que deberá salvar el puerto de La Pedraja.

Por si los disgustos fueran pocos en torno a esta infraestructura, con el tramo entre Villafranca y Villamayor del Río las noticias no son nada halagüeñas. Hace seis meses el Ministerio confirmaba a este periódico que habrá que licitar un contrato para revisar de manera «profunda» ese proyecto, pero sin ofrecer ningún plazo. Siendo claros, la posible construcción de este segmento de autovía, que entre otras funciones sacará de una vez por todas los camiones de localidades como Belorado, no será realidad al menos hasta la década que viene. Lo mismo sucederá con el que tiene que vadear La Pedraja. Y mucho tendrá que correr el Ministerio para que el Burgos-Ibeas se concluya antes de 2030.