Alex Renfroe sonreía. Esa era la mejor noticia para el San Pablo. Después de unas semanas de mucha incertidumbre y preocupación por el brote en la plantilla, el base azulón se presentó en la rueda de prensa relajado y de buen humor. «¿Qué ha sido el mayor desafío del partido? Yo creo que llegar hasta aquí», soltó el americano entre risas.
A nadie se le escapa que la plantilla burgalesa lo ha pasado muy mal en las últimas semanas por el goteo de contagios en sus filas. De hecho, Renfroe es el único integrante del equipo que todavía no ha pasado el virus. La disputa del encuentro estuvo en el aire hasta última hora y, finalmente, la Basketball Champions League, obligó a que se celebrara. La recompensa para el San Pablo es un triunfo que le encamina al play off y que tiene un valor doble por las circunstancias. «Lo hemos pasado muy mal últimamente, pero esto es la vida, esto es baloncesto y hay que mantener la cabeza arriba y seguir peleando. Salimos a la pista sin importar quién faltaba porque siempre tenemos una mentalidad de equipo», aseguró Renfroe.
El americano destacó la labor de los canteranos Alberto Alonso, Kareem Queeley y Ángel Infante y también el manejo de los tiempos por parte de Joan Peñarroya: «El entrenador hizo muy buen trabajo con las rotaciones porque nos mantuvo frescos y los jóvenes entraron muy bien al partido y nos ayudaron mucho. Esto es un trabajo de equipo, un gran trabajo de grupo, y afortunadamente nos hemos llevado la victoria».
Pasado en Letonia. Renfroe volvió a la que fue su casa durante la temporada 2009/10, en la que formó parte del plantel del VEF Riga. El estadounidense se mostró «muy contento por estar de vuelta después de mucho tiempo» y también por sumar «un triunfo muy importante» para el San Pablo. No obstante, fue inconformista en su discurso y avisó de que «hay que seguir luchando para lo que viene». Por último, mandó ánimo a los compañeros que no pudieron viajar.