Las obras de Panattoni para levantar en el polígono de Ircio su mayor proyecto logístico de toda la Península Ibérica van avanzando y las máquinas no paran de trabajar.  El objetivo de la compañía, según explican a este periódico, pasa por tener disponible la primera fase para finales del tercer trimestre de este año, 2024. Eso sí, el proceso para comercializar las cuatro naves que componen la etapa inicial ya ha comenzado. La empresa inmobiliaria Colliers, que se está encargando de centralizar esta actividad, acaba de publicar el anuncio, a través del cual se puede contactar para alquilar el conjunto de 62.000 metros cuadrados o cada módulo de 14.000 metros.

Desde Colliers explican en conversación con Diario de Burgos que las obras avanzan a buen ritmo y tienen sobre la mesa a «alguna empresa que está estudiándolo para implantarse en la zona, porque es bastante buena para el reparto por el norte de España y tiene unas comunicaciones muy buenas». Asimismo, aclaran que cualquiera de los cuatro módulos que componen la primera fase de Panattoni en Miranda están disponibles, aunque añaden que ya «hay algún interesado» en arrendar espacios concretos y emprender su actividad en el polígono de Ircio.

La promotora inmo-logística Panattoni adquirió cerca de 285.000 metros cuadrados en esta zona industrial en la primavera del curso pasado, cuando ingresó a la Junta de Castilla y León los casi once millones de euros en los que estaba tasado el terreno. Justo en ese instante, destapó algunos detalles de su macroproyecto, que supondrá una inversión de 90 millones de euros en el momento en el que se haya ejecutado por completo. En este sentido, las cuatro naves de la primera fase, realmente, no ocuparán ni la mitad del suelo construido, ya que la segunda etapa incluye otros cuatro módulos con una superficie cercana a los 71.000 metros cuadrados.

En ambos casos, el plan presentado por Panattoni inicialmente y que ahora se anuncia a través de Colliers establece que la construcción contará con una altura libre de 11 metros. Asimismo, está previsto que se habiliten hasta 156 muelles de carga, de los que 70 se abrirán en las naves de la etapa inicial y 92 estarán en el espacio destinado a la segunda fase. La cubierta de este enorme edificio albergará placas solares y en total se contará con una potencia eléctrica de 35 vatios por metro cuadrado, mientras que en la zona exterior se reservará un amplio terreno para crear casi 1.400 plazas de parquin.

Los plazos para concluir el proyecto en su conjunto todavía no se han marcado de forma definitiva. El propio Gustavo Cardozo, director de Panattoni para España y Portugal, explicaba a DB durante su última entrevista que «la segunda fase se escalonará o se hará en su totalidad dependiendo de cómo vaya el mercado de la primera».