El equipo de gobierno socialista tiene lista ya la ordenanza que regulará el tráfico en la villa ducal y que prevé sacar los coches de la Plaza Mayor, la de San Blas y sus aledaños. El documento está listo para salir a información pública en breve de cara a la presentación de alegaciones para seguir después con los tramites pertinentes que finalicen con su aprobación en pleno municipal. 

Será en ese periodo de exposición cuando se midan los apoyos que los vecinos y sectores como la hostelería y el comercio dan al proyecto o, por el contrario, quede patente el rechazo a una solución que los socialistas plantean para mejorar un entorno «envidiable» libre de vehículos y con el que la villa ducal se modernice, tal y como explica la alcaldesa, María del Carmen Castillo, que en principio opta por la prudencia a la espera de ver qué opinan los lermeños y sin descartar que haya que introducir algunas modificaciones. 

Castillo reconoce que por el momento no se han mantenido reuniones con los empresarios y comerciantes del casco histórico para consensuar esa regulación, pero recalca que estarán abiertos a sugerencias y propuestas para mejorar ese entorno. En todo caso, la regidora añade que en cuanto a la ordenación del tráfico, apenas se modifican el sentido de circulación en las vías, porque tampoco hay muchas opciones de tránsito, pero sí que su grupo apuesta por dejar libre de coches el casco histórico, que entiende beneficioso para todos, vecinos, empresarios y comerciantes y sobre todo para mejora la imagen de una «villa que vive del turismo»; Castillo añade que «si queremos un entorno histórico bonito y agradable no podemos tenerle lleno de coches que, además de impedir disfrutar de sus monumentos, y hasta poderse hacer fotos, ensucia y contamina la villa».     

Además, la alcaldesa afirma que Lerma tiene plazas de aparcamientos suficientes, en el entorno de la plaza de toros, en la zona habilitadas junto a la plaza de los Mesones y en la plaza Santa Teresa, «por lo que no hay que buscar alternativas, sino que ya existe», recalca, para añadir que «las plazas de aparcamiento en Lerma están sin utilizar. No obstante, el equipo de gobierno sigue buscando nuevos espacios para habilitarlos como estacionamiento porque no quiere que esa sea la excusa para oponerse, añade.  

Castillo reconoce que la medida   no se implantará de un día para otro y que su grupo municipal no es intransigente y se tendrán en cuenta pros y contra si hay que modificar algunos aspectos, «porque no se va contra nadie», pero está convencida que los sectores de la hostelería y el comercio «serán los más beneficiados».  

No es la primera vez que se plantea la peatonalización en el casco histórico lermeño. Ya en 2019, durante la legislatura en la que ganó la candidatura independiente Iniciativa por Lerma, con Celia Izquierdo a la cabeza, se elaboró una ordenanza reguladora, que no contó con el apoyo de los comerciantes y hosteleros y que, finalmente, no salió adelante en el pleno municipal, llegando incluso a votar en contra Ciudadanos, entonces socio del equipo de gobierno, que se alineó en este tema con el PP. Se decidió entonces crear una mesa de trabajo con todos los sectores implicados que no ha tenido continuidad en las siguientes legislaturas, aunque siempre es un tema que está «sobre la mesa». 

En esta ocasión, la alcaidesa espera que pueda salir adelante su propuesta, aunque al igual que reconoce que no se ha mantenido reuniones con los comerciantes, tampoco hasta ahora se ha llevado la ordenanza a ninguna comisión informativa para estudiarla con la oposición. 

Residencia y centro de día. Otro de los proyectos prioritarios para el PSOE es la construcción de una nueva residencia y centro de día para satisfacer la demanda no solo de Lerma sino de la comarca en esa atención a las personas mayores.  Con el proyecto redactado, el PP lo retiró cuando se alzó con la Alcaldía tras la moción de censura que destituyó al socialista Miguel Ángel Rojo. 

El PSOE defiende el proyecto, pero en estos momentos, la alcaldesa reconoce que sin ayudas de la Junta y la Diputación, el Ayuntamiento no puede abordar esa obra, por lo que siguen trabajando en busca de otras fuentes de financiación para poder ejecutar una infraestructura «necesaria».