Paloma Navares (Burgos, 1947) lleva más de cuarenta años creando a partir de un lenguaje plástico propio que combina la fotografía, el vídeo, el sonido y la luz a los que da vida en instalaciones, esculturas, objetos, collages o escenografías. Considerada pionera en el trabajo de género, el tema de la mujer impregna de manera transversal toda su obra. En ella aborda también diferentes aspectos de las temáticas sociales, las costumbres y tradiciones, las emociones internas y sus extremos, el paso del tiempo, la imagen ideal del individuo social, la cuestión de la belleza corporal o la muerte.

Por su «madurez creativa y dedicación», la Fundación ENAIRE que depende del Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible acaba de concederle el Premio a la Trayectoria. La distinción honorífica está dotada con 17.000 euros y conlleva la organización de una exposición que servirá para inaugurar el Festival Internacional de fotografía PHotoESPAÑA, que este año celebra su XXVII edición. Será a partir del 29 de mayo en el Real Jardín Botánico de Madrid, muy cerquita del Museo Thyssen, que le dedicó una exposición individual en 2018.

«Estoy emocionada porque se trata de un premio importante y estas cosas te animan. No solo por el dinero, pero también. Sobre todo porque te puede sacar de un apuro. Ahora no me está yendo mal, de hecho acabo de tener una exposición muy grande en el Centre del Carmen de Valencia, pero el mundo del arte puede ser a veces muy difícil», afirma la creadora burgalesa que reconoce haber recibido otros premios «pero no con la repercusión que está teniendo este».

Además de la exposición en el Jardín Botánico, a la que llevará piezas antiguas y otras más nuevas seleccionadas de entre las 80 que ha expuesto en Valencia, el premio conlleva otra muestra en septiembre en Santander, en las Naves de Gamazo. 

«Lo que voy a mostrar en ambas sedes es lo que llevo haciendo todos estos años desde que empecé siendo una precursora en el uso del vídeo y en el tratamiento del tema del feminismo. Porque ahora puede que no lo parezca, pero las mujeres hemos sido tratadas siempre como perdedoras», asegura.

A este calendario añadirá otras citas que la artista visual ya tenía cerradas, como su presencia en ARCO o en Alemania, donde acude casi todos los años.