Ayudas (escasas) para combatir enfermedades ganaderas

Miguel Herrera (SPC)-Agencias
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El Gobierno destinará 23 millones de euros para combatir varias enfermedades, cifra inferior a la que han aportado hasta ahora solo entre Castilla y León y Extremadura contra la EHE, que sigue expandiéndose por el norte peninsular

Ayudas (escasas) para combatir enfermedades ganaderas

La sanidad animal es un tema candente. En los últimos años ha habido brotes relativamente inesperados de varias patologías como la gripe aviar, la viruela ovina y caprina o la enfermedad hemorrágica epizoótica (EHE), aparte de estar presentes algunas otras que también complican el día a día de los ganaderos. La aparición de estas enfermedades implica sacrificios de explotaciones enteras o restricciones al movimiento de animales vivos, al consumo de sus productos o a las exportaciones. Es un asunto peliagudo para los profesionales de un sector ya bastante apretado debido a los costes de producción (a pesar de los bajos precios del grano, los piensos apenas se han abaratado).

Después de una absoluta inoperancia en 2023 y llegando tarde este año, para intentar paliar en la medida de lo posible esta situación el Gobierno ha tomado cartas en el asunto y el Consejo de Ministros ha aprobado este martes un paquete de 23 millones de euros en ayudas al sector ganadero para combatir enfermedades animales y mantener su estatus sanitario; en concreto, los fondos irán destinados a la EHE (15 millones), la tuberculosis bovina y la lengua azul. El objetivo es compensar los gastos ocasionados por la enfermedad hemorrágica, financiar el Programa nacional de erradicación de la tuberculosis bovina y la compra de vacunas contra el serotipo 8 de la lengua azul.

El Ministerio de Agricultura ha detallado en un comunicado que las ayudas para la EHE irán destinadas a compensar por las pérdidas de animales, por la desinsectación de las explotaciones y por los gastos veterinarios asumidos por el ganadero para luchar contra esta enfermedad, entre los que se incluyen los desembolsos para la adquisición de vacunas para aquellos ganaderos que decidan voluntariamente utilizarla. Con estas subvenciones, el Gobierno refuerza con fondos nacionales las ayudas establecidas por las comunidades autónomas para combatir esta enfermedad, lo que movilizará fondos adicionales, hasta un total de 30 millones de euros, ya que se trata de medidas que deben ser cofinanciadas al 50%.

Ayudas (escasas) para combatir enfermedades ganaderasAyudas (escasas) para combatir enfermedades ganaderasDe esta forma, el Gobierno «cumple» con su compromiso anunciado en el Foro Nacional de la Ganadería Extensiva, celebrado en Toledo en mayo, de poner en marcha un programa nacional de apoyo económico a los ganaderos afectados por la EHE, que apareció en España en 2022 y ha tenido (y sigue teniendo) un importante impacto en el ganado vacuno en la mayor parte del país a lo largo de 2023 y 2024.

Asimismo, el Consejo de Ministros ha autorizado la territorialización de siete millones de euros para apoyar el Programa Nacional de Erradicación de Tuberculosis Bovina; de esta forma el Gobierno complementa la financiación de la Unión Europea y se asegura el «correcto» funcionamiento de un programa «básico» para la salud pública y para la sanidad de las explotaciones ganaderas.

En el mismo Consejo, el Ejecutivo ha aprobado la distribución de fondos a las comunidades autónomas para el Programa Nacional de Erradicación de la Lengua Azul, con regiones como Castilla y León (578.816 euros) o Cataluña (513.685 euros) a la cabeza en el reparto, para apoyar el 50% del coste de la vacunación del serotipo 8 de esta patología.

«Tarde y mal».

Respecto a estas ayudas, los consejeros del ramo del Partido Popular han acusado este martes al ministro de Agricultura, Luis Planas, de «abandonar» a los ganaderos españoles frente al virus de la lengua azul. Asimismo, han asegurado que algunas comunidades han destinado más fondos a combatir la EHE «que lo que quiere dar ahora Planas». Castilla y León, por ejemplo, ha aportado más de 19 millones para combatir esa enfermedad y la lengua azul, a los que se añaden casi 8 millones de Extremadura, 9,2 millones de Galicia, y 2,2 millones de Madrid.

La vicesecretaria de Desarrollo Sostenible del PP, Paloma Martín, ha criticado que «el Ministerio ha ignorado a los ganaderos y a las comunidades autónomas durante casi dos años y ahora anuncia que va a distribuir solo 15 millones de euros [para la EHE] para toda España». Ha acusado a Agricultura de «improvisación» y «falta de estrategia», ya que su apoyo «es escaso, llega tarde y mal», y obliga a gastar los fondos antes del próximo 31 de diciembre, cuando algunas ayudas comprometidas todavía no han llegado a las comunidades. «Este Gobierno ha perdido el tren de la EHE y de tantas otras prioridades del sector primario; no puede perder ahora el de la lengua azul», ha reprochado Martín, después de que se hayan detectado varios focos de ese virus en Portugal y otro en Extremadura.

EHE y lengua azul. Y es que el problema de la lengua azul, ya presente en varias zonas de España, puede empeorar si el serotipo 3, más virulento que los presentes en nuestro país y recientemente detectado en Portugal, cruzara la frontera, de la que apenas le separan 60 kilómetros. Los servicios veterinarios oficiales lusos han detectado la circulación de este serotipo 3 en tres explotaciones de ganado ovino ubicadas en Torre de Coelheiros (Región de Évora).

El serotipo 3 de la lengua azul, presente en el norte de África (Túnez) desde 2018, se detectó por primera vez en Países Bajos en octubre de 2023. Es de especial importancia, ya que produce cuadros clínicos severos y elevada mortalidad en ovinos (entre un 10% y un 25%), así como perjuicios en ganado bovino con pérdidas en la producción láctea, no descartándose mortalidad en las explotaciones afectadas, según ha indicado el Ministerio. Desde su aparición en octubre de 2023 se ha extendido por distintos países de Europa: Países Bajos, Alemania, Bélgica, Luxemburgo, Suiza, Dinamarca, Noruega, Suecia, República Checa, Francia, Reino Unido y ahora Portugal.

Tras la confirmación de este foco, España ha acordado con las autoridades portuguesas interrumpir por el momento el movimiento de animales susceptibles de portar el virus de la lengua azul procedentes de Portugal y con destino a España hasta que se disponga de más información sobre la situación epidemiológica de la enfermedad.

Ante esta situación, el Ministerio de Agricultura va a comprar 655.000 dosis de la vacuna contra el serotipo 3 para «apoyar» a las comunidades autónomas y animar a la vacunación en las zonas limítrofes con Portugal donde se ha detectado un foco. Agricultura tratará de facilitar la vacunación voluntaria en las provincias de Badajoz y Huelva, sin descartar que en las próximas semanas se amplíe a Cáceres, Salamanca y Zamora, buscando evitar «las dificultades de mercado y de rentabilidad que se puedan producir en las explotaciones», ha indicado Planas.

En cuanto a la EHE, y sin disponer de la actualización semanal al cierre de estas páginas, cada siete días el Ministerio da un nuevo parte en el que el número de focos va aumentando, sobre todo en la mitad norte del país. En el de hace siete días se reportaban nuevos brotes en Galicia, Cataluña, Castilla y León, Cantabria, Asturias y la Comunidad de Madrid, concretamente 27 en ganaderías de vacuno y otro en ciervo. Hasta la fecha, tan solo las Islas Baleares y Canarias tienen la consideración de territorio libre de EHE.

 

Retos a afrontar.

La sanidad animal española se ha enfrentado en los dos últimos años a la resurrección de la viruela ovina tras 50 años sin casos y a la irrupción de la EHE, además de brotes de gripe aviar o la sempiterna tuberculosis bovina. Pero además planea la sombra de otras enfermedades como la lengua azul o la peste porcina africana. Mantener a raya estas enfermedades es esencial para el sector ganadero, pero también para la salud humana, dado que algunas de ellas, como la tuberculosis o la gripe aviar, pueden transmitirse a las personas.

Lengua azul

Se trata de una enfermedad vírica, no transmisible a personas, que afecta principalmente al ganado ovino y de la que, aunque hay más de 24 serotipos identificados, en España sólo circulan las cepas 1, 4 y 8. Pero los servicios sanitarios están atentos a la aparición del serotipo 3, de especial virulencia, a apenas 60 kilómetros de la frontera con Portugal. La ventaja en su abordaje es que existe vacuna efectiva y un protocolo que se activa cuando se declara algún foco, como acaba de ocurrir en Baleares. Actualmente están libres de la enfermedad las autonomías de La Rioja, Navarra y País Vasco y las provincias de Castellón, Valencia, Teruel, Zaragoza, Guadalajara, Soria, Burgos, Palencia, León, Valladolid, algunas comarcas de Segovia y de Zamora, las islas de Menorca, Ibiza, Formentera y todo el archipiélago canario.

Viruela ovina y caprina

La reaparecida y de nuevo erradicada viruela ovina y caprina es una enfermedad muy grave y contagiosa, que tampoco se transmite a humanos, que sorprendió a la profesión veterinaria cuando hizo su aparición hace justo dos años, primero en Andalucía y luego en Castilla-La Mancha, tras 50 años de ausencia. España consiguió atajar los focos y volver a estar libre tras un año de lucha y miles de reses sacrificadas. Los países más cercanos a España con focos activos son Grecia, Libia y Bulgaria, según la Organización Mundial de la Salud Animal (OMSA).

EHE

La enfermedad hemorrágica epizoótica llegó a España hace algo menos de dos años, probablemente procedente del norte de África, y ha barrido la península de sur a norte, donde ahora se concentra la mayor parte de los casos. No es zoonótica (no es peligrosa para los humanos) y afecta principalmente al vacuno y a cérvidos, aunque también infecta a cabras y ovejas. La transmite un mosquito que circula normalmente entre junio y noviembre y España ya tiene una vacuna cuya financiación estará apoyada con dinero público. Más allá de los animales que mueren, que no son demasiados, lo peor es que deja secuelas reproductivas en los que sobreviven.

Tuberculosis bovina

La lucha contra la tuberculosis bovina es un antiguo frente de batalla en España y su abordaje consiste tanto en implementar programas de vigilancia como de erradicación. Ese esfuerzo ha hecho que su prevalencia haya caído al 0,17% en 2023 frente al 1,80% de prevalencia de hace 20 años. El año pasado se le hizo la prueba de la tuberculina a 5,3 millones de animales, de los que solo 8.925 dieron positivo. Andalucía, Castilla-La Mancha, La Rioja, Madrid y Extremadura son, por este orden, las más afectadas por esta enfermedad que sí puede transmitirse a humanos a través de aerosoles y que tiene su principal reservorio en los ungulados silvestres.

PPA

La peste porcina africana es la gran temida porque su llegada impactaría en el principal motor ganadero del país al cerrarse las puertas a la exportación de productos del cerdo. España es un país libre de esta patología desde 1994 pero el sector ha visto, con temor, cómo se ha expandido en los últimos años por algunos países centroeuropeos, entre ellos Alemania e Italia, con focos activos actualmente. No es transmisible a humanos y aún no se ha conseguido una vacuna efectiva.

Gripe aviar

La influenza aviar está sorprendiendo a los científicos por su capacidad de mutación, llegando a conquistar nuevos territorios (recientemente la Antártida) y nuevas especies, como vacuno lechero o pingüinos. Afecta a los humanos y, a nivel ganadero, la declaración de focos en un país también impacta en las exportaciones. En España, actualmente, la situación es de cierta tranquilidad, con un solo brote activo en aves silvestres en Galicia, mientras que no se han constatado casos en aves domésticas desde marzo de 2023.

La sanidad animal española se ha enfrentado en los dos últimos años a la resurrección de la viruela ovina tras 50 años sin casos y a la irrupción de la EHE, además de brotes de gripe aviar o la sempiterna tuberculosis bovina. Pero además planea la sombra de otras enfermedades como la lengua azul o la peste porcina africana. Mantener a raya estas enfermedades es esencial para el sector ganadero, pero también para la salud humana, dado que algunas de ellas, como la tuberculosis o la gripe aviar, pueden transmitirse a las personas.