El primer secretario del PSC, Salvador Illa, ha vuelto a ofrecer "mano tendida" al Govern de Pere Aragonès para aprobar los presupuestos de la Generalitat para 2023 y ha asegurado que no tiene "ninguna prisa" para ir a elecciones. Por su parte, el president también ha recibido el apoyo de la líder de En Comú Podem (ECP), Jéssica Albiach, que ha ofrecido otra "mano tendida" para la construcción de "una mayoría progresista" que sustente al Govern a partir de ahora, aunque ha advertido que su formación no le dará "un cheque en blanco".
En su visita al municipio de Bagà (Barcelona), Illa se ha referido a la decisión de JxCat de romper con ERC y abandonar el Govern, lo que deja a Aragonès con un ejecutivo sustentado en tan solo los 33 diputados de su partido, lejos de la mayoría absoluta.
A la espera de que el lunes la comisión ejecutiva del PSC celebre una reunión extraordinaria para trazar la estrategia a seguir a partir de ahora, Illa ha explicado que propondrá "seguir construyendo una alternativa" al actual Govern, aunque sin forzar los tiempos: "No tenemos prisa para nada", ha insistido.
"No somos amigos de volantazos ni bandazos", ha recalcado Illa, que ha puntualizado que "construir una alternativa no significa decir no a todo", por lo que seguirá "tendiendo la mano para que Cataluña tenga un presupuesto de país".
Para Illa, "es momento de responsabilidad, de sentido común, de pensar más en los intereses de los catalanes que en los intereses de partido".
Frente a las críticas de PP y Cs a los socialistas por actuar como "muleta" del Govern de Aragonès, ha subrayado: "Yo no rescato a ningún gobierno, yo rescato a Cataluña".
En este momento "muy complejo" que vive Europa en general y Cataluña en particular, según Illa, "se necesitan gobiernos fuertes y estables", que desplieguen una "política constructiva y útil".
"En Cataluña, tenemos todo lo contrario", ha lamentado Illa, que ha destacado que se cumplen "500 días" de un Govern "muy débil", que se ha caracterizado hasta ahora por la "confrontación permanente" entre ERC y JxCat, solo "interesados en peleas internas".
Illa ha lanzado un "mensaje de tranquilidad, confianza y esperanza" a los catalanes y ha defendido una alternativa que se plantee "mirar hacia adelante, avanzar y no retroceder, solucionar problemas y no quedar enquistados" en ellos: "Hay un camino diferente, en el que caben todos", ha apostillado.
Los comunes no ofrecerán cheques en blanco
Por su parte, la líder de En Comú Podem (ECP), Jéssica Albiach, ha ofrecido al presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, una "mano tendida" para la construcción de "una mayoría progresista" que sustente al Govern a partir de ahora, aunque ha advertido que su formación no le dará "un cheque en blanco".
Albiach, que ha pedido a Aragonès que inicie con carácter inmediato una ronda de contactos, ha recordado este sábado en una rueda de prensa que ERC empezó reivindicando una mayoría del 80 %, quiso gobernar con una del 52 % y ahora mismo sólo cuenta con un 21 % de apoyos, los de los 33 diputados de este partido.
"Dos años perdidos y un gobierno roto nunca es una buena noticia y menos en medio de una crisis económica y social -ha afirmado-, pero sin embargo hay la posibilidad de construir una mayoría progresista que ya existía tras las elecciones del 14F" pero que Aragonès desestimó para formar un Govern independentista.
Según Albiach, "hacen falta gobiernos fuertes, con un rumbo claro y que pongan las necesidades de la gente del país como primera prioridad".
Sobre la posibilidad de que los comunes entren en el nuevo gobierno, Albiach ha asegurado no haber recibido ninguna llamada de Pere Aragonès en las últimas horas, y ha puntualizado que la cuestión no es si estarán o no en el Ejecutivo sino "si Aragonès desea articular una mayoría de progreso o no"
Con respecto a la salida de JxCat del Govern, ha señalado que los comunes "no participarán en el festival de reproches que algunos quieren poner en marcha, y si bien es cierto que era la crónica de una muerte anunciada, no es momento de reproches sino de poner los intereses de los catalanes por delante de todo".
Jéssica Albiach ha pedido a Aragonès que tenga "altura de miras" y sepa reconocer, en primer lugar, la situación de "extrema debilidad" en la que se encuentra ahora mismo, teniendo en cuenta que "se ha quedado solo" y que "sólo dispone del apoyo de 33 de los 135 diputados del Parlament".
Si el presidente de la Generalitat opta por "articular una mayoría de progreso", Albiach le ha lanzado una advertencia que también podría ser considerada como un consejo: "las mayorías no se decretan sino que se construyen" y él "está demasiado acostumbrado a gobernar desde el atril y poco a negociar".
"La responsabilidad es suya -ha insistido-, y por esto le pedimos que inicie una ronda de negociaciones con los partidos para construir una mayoría de progreso".