Pese a la derrota en Huesca, Jon Pérez Bolo ve a su plantilla "muy ilusionada" para este último tramo de Liga, "con muchas ganas de trabajar. Tenemos ganas de volver a levantarnos y sacar los tres puntos". El técnico valora el enfrentamiento de mañana ante el Espanyol como "un partido más" ante un rival "importante". "Quedan diez jornadas y hay que seguir peleando. Mañana no se decide nada, queda un trayecto muy largo y hay que ir día a día". Sobre el Espanyol, asegura que es un equipo "de Primera División que está en Segunda". "Por entidad, afición, por todo, está llamado a pelear por el ascenso, pero ya en la primera vuelta les pusimos las cosas muy difíciles. Tiene una plantilla muy buena pero nosotros intentaremos fortalecer nuestras virtudes".

Para esta cita recupera a Appin, Fer Niño y Atienza, que cumplieron su sanción en Huesca; y a Aitor Córdoba, recuperado de su lesión. Appin regresó con molestias de su estancia con su selección pero parece que podrá estar disponible.