Enrique Pascual, elegido presidente del consejo ribereño por unanimidad

N.L.V. / Aranda
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«Vender más vino y más caro» será la prioridad de un mandato que se prolongará durante cinco años y en el que primará la adopción de decisiones por consenso, afirmó el bodeguero

El nuevo presidente (izq.) realizó su primera comparecencia pública como tal acompañado por el secretario del Consejo Regulador, Alfonso Sánchez. - Foto: DB

A falta de un mero formalismo, que sea ratificado por la Consejería de Agricultura de la Junta de Castilla y León, la Denominación de Origen Ribera del Duero cuenta desde ayer por la mañana con nuevo presidente, el bodeguero Enrique Pascual, gerente de Bodegas Pascual SA, enclavada en la localidad burgalesa de Fuentelcésped, y quien en el anterior mandato ya ocupó una vocalía como representante del colectivo transformador. Después de más de un mes de quinielas y pronósticos más o menos acertados, se cumplió lo previsto y, ante las dificultades encontradas para dar con alguien ajeno al Consejo Regulador dispuesto a asumir este cargo, ha sido uno de los vocales del sector elaborador quien detentará esta responsabilidad.

La designación, tal y como pretendían los bodegueros, se llevó a cabo con el respaldo unánime de todos los integrantes del plenario ribereño, que ya habían alcanzado un acuerdo la semana pasada.  Un gesto que, aseguró Pascual, deja constancia de que «todos miramos en la misma dirección» marca una nueva forma de funcionar en el ente gestor ribereño, en el que se primará la búsqueda del consenso para sacar adelante los temas ya que «está claro de que una mayoría de ningún lado puede aplicar su rodillo».

Respecto a las directrices del mandato que ahora empieza y que, en principio, está previsto que se prolongue durante cinco años, el presidente electo resumió su leitmotiv con la frase «vender más vino y vender más caro». Algo que, a su juicio, repercutirá positivamente en todo el sector ya que el valor añadido permitirá que «nuestros viticultores puedan cobrar más cara la uva».

Aunque reconoció que habrá que analizar las campañas puestas en marcha en los últimos años «para que sea lo más rentable y positivo posible», adelantó que se seguirá apostando por la promoción, tanto dentro como fuera de las fronteras nacionales. Asimismo, incidió en que para seguir posicionándose de manera firme en los mercados es necesario mantener la apuesta por la calidad que ha distinguido siempre a la Ribera del Duero.

La contratación de un gerente, con claro perfil comercial, tal y como adelantó Diario de Burgos la semana pasada, porque «la clave de todo es vender en unas condiciones buenas para que la Ribera sea cada vez más grande» y la adaptación del reglamento de Ribera del Duero, tanto a los nuevos tiempos como a la nueva normativa sectorial, fueron otros der los temas que explicó que se tendrán sobre la mesa durante la recién estrenada legislatura.

Por último, Pascual, que en la actualidad es también presidente de la Asociación de Empresarios de Bodegas de Ribera del Duero (Asebor), admitió que habrá que replantearse su permanencia en este cargo, adelantando que será difícil que pueda compatibilizarlo con la presidencia del Consejo Regulador de Ribera del Duero.