La conocía de coincidir con ella en el gimnasio. Un buen día, tras salir del establecimiento, decidió seguirla hasta su domicilio. Por el camino le propuso mantener relaciones sexuales. Al negarse la muchacha, que era menor de edad, decidió practicarle todo tipo de tocamientos. La Audiencia Provincial le ha condenado ahora a una pena de un año y medio de prisión por la comisión de un delito de abusos sexuales. También impide al autor de los hechos acercarse a la víctima a una distancia menor de 300 metros durante seis años.
Los hechos ocurrieron el 21 de octubre del año 2020, pasadas las 21 horas. Tanto el delincuente sexual como la chica habían salido a esa hora del gimnasio. Cuando ambos caminaban por la misma calle, el hombre la abordó para preguntarle si se acordaba de él, a lo que añadió que sabía de un lugar donde le dejaban hacer pesas. La acompañó durante un buen trecho a su casa, mientras le insistía para que se fuera con él a conocer su piso y de que no le iba a pasar nada porque en la casa se hallaba su novia. «Te puedo llevar a los mejores restaurantes», le espetó antes de ponerle su mano en la cintura.
Cuando la joven llegaba ya a su bloque y se disponía a abrir la puerta del portal el hombre se situó detrás de ella y empezó a realizarle tocamientos en los glúteos mientras le decía que no se preocupara, porque llevaba preservativos. La muchacha, muy asustada en ese momento, logró zafarse del acusado y subió hasta su domicilio. Tras contar lo sucedido a su familia decidió presentar denuncia ante la Policía Nacional, que detuvo al autor de los hechos.
Hasta tal punto lo pasó mal la víctima que sufrió síndrome de estrés postraumático, lo que le imposibilitó acudir al colegio desde el 21 de octubre hasta el 2 de diciembre. De hecho, la sentencia del tribunal provincial reconoce a la joven el derecho a percibir una indemnización de 10.000 euros en concepto de responsabilidad civil y por las secuelas psicológicas causadas.
Finalmente no se celebró vista oral puesto que la Fiscalía y la defensa del procesado llegaron a un acuerdo antes del juicio, por lo que la sentencia dictada es de conformidad.
Al margen del año y medio de prisión que le ha impuesto la Audiencia, prohíbe al sujeto aproximarse a la víctima a una distancia inferior a 300 metros de su domicilio, lugar de trabajo o cualquier sitio frecuentado por ella durante un periodo de 6 años. Asimismo, le impone al condenado cinco años de libertad vigilada. Las costas procesales correrán a cargo de autor de los hechos y la sentencia, al ser de conformidad, ya es firme, por lo que no podrá ser recurrida ante ninguna otra instancia judicial superior.