Son cerca de 10.000 casos. Más de 129.000 documentos que se habían guardado celosamente en los archivos nacionales de Washington. Hasta ahora: el gobierno de Estados Unidos acaba de desclasificar y hacer públicos a través de la red decenas de miles de archivos alusivos a avistamientos de OVNIS en el todo mundo durante décadas. Incluye llamativos casos registrados en España, cuyo Ejecutivo ya hizo algo similar hace dos décadas, desvelando las investigaciones que sobre casos relacionados con fenómenos extraños se habían llevado a cabo. Dos de estos son especialmente llamativos. Y de los dos se cumplen ahora 40 años.
El primero, y acaso el más importante por cuanto fue investigado por el Ejército y posteriormente clasificado como secreto durante décadas, es el registrado el 1 de enero de 1975 en Quintanaortuño, del que fueron testigos cuatro jóvenes cántabros que viajaban hacia Burgos, donde estaban prestando el Servicio Militar. Una poderosa y extraña luz, con distintas intensidades, que se movía y se multiplicaba, los hizo detenerse.En el reportaje que acompaña este texto se da cuenta del suceso por boca de uno de sus testigos.
Cuatro meses después otro incidente extraño volvió a poner Burgos en el foco de la ufología. El 29 de abril de aquel agitado 1975, Gregorio de Juana, Manuel Maté y Julián García regresaban a casa, en la finca La Pinilla tras haber presenciado una función nocturna de circo en Peral de Arlanza. Viajaban en un Simca 1200 cuando un fuerte chorro de luz los deslumbró. Más tarde declararía que se trataba de un objeto esférico.
Asustados, detuvieron el coche. Su asombro fue mayor cuando, procedente de esa luz, según su testimonio, vieron recortarse una silueta de gran envergadura que, al cabo, regresó a la esfera de luz, por donde desapareció. Mudos, los jóvenes arrancaron el coche mientras aquella fantasmagórica luz comenzaba a moverse y se agrandaba a cada paso. Según relatarían los testigos, aquella extraña de bola de fuego parecía perseguirles, así que en lugar de seguir camino decidieron regresar a Peral y avisar a las autoridades.
Era ya cerca de la una de la madrugada. Lograron avisar al alcalde, que fue testigo de la intensidad de aquella extraña luz, que sin embargo fue alejándose del pueblo hasta que pareció extinguirse. Los alterados jóvenes decidieron entonces iniciar de nuevo el viaje de regreso. De haber sabido lo que les esperaba, jamás lo hubieran hecho: de nuevo, en mitad de la negrura de la noche de abril, irrumpió aquella misteriosa luminiscencia que parecía, de nuevo, perseguirles, que se cruzaba en su camino, a menos de diez metros del vehículo, como si intentase detenerlo.En su relato, los muchachos llegaron a confesar que el motor perdía fuerza y que temieron que llegara a pararse.
Lograron llegar a la finca, donde otros compañeros fueron asimismo testigos de aquel fenómeno tan radical e insólito, que poco después desapareció, devolviendo a la noche de abril toda su negrura. Agentes de la Guardia Civil de Burgos abrirían una investigación y tomarían declaración a los protagonistas, pero jamás se conoció conclusión alguna.
Los supuestos avistamientos de fenómenos extraños fueron muy recurrentes en los años 70 y primeros 80, gozando de eco en la prensa de la época. En Burgos los registros datan desde 1952. Diario de Burgos recogió el acontecimiento acaecido el día 5 de diciembre: al parecer ese día «Dos formas difusas que dejaban una estela blanca» atravesaron la ciudad. «Desde la redacción se llamó al aeródromo de Villafría, donde nos afirman que no tienen registrado el paso de ningún avión».
El 6 de marzo de 1968 fue visto en el firmamento un objeto extraño que desprendía destellos y cambiaba de color. DB recogía en su edición del día siguiente que «Las luces no eran propias de un avión, ni tampoco el objeto aludido se desplazaba con la velocidad que es consustancial a los mismos. El citado objeto -o lo que fuera- apareció en dirección suroeste, desplazándose en su lenta marcha hacia la derecha...».
En el año 1977, cinco miembros de una misma familia de Montorio, en el Páramo de Masa, aseguraron haber presenciado un círculo luminoso y verde. En 2003, un vecino de Castrojeriz también confesó haber sido deslumbrado por una luz sobrenatural...