La recaudación del Ayuntamiento de Aranda por los impuestos directos tendrá este año un incremento de un millón de euros, hasta alcanzar los 15,6 millones. Esta subida se debe al aumento de los recibos, tanto en cuantía como en número, del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), mientras que el resto (de actividades económicas, de vehículos de tracción mecánica o de construcción, entre otros) se mantienen más o menos invariables.
La mayor cuantía que se va a recaudar por el impuesto inmobiliario, tanto en la categoría de rústica como en el de urbano se justifica por dos motivos. El principal es que cada recibo va a subir un 10% para todos los propietarios. «Nos queda el último tramo de la subida que se aprobó en el año 2015, este año es el último que se aplica», apunta el concejal de Hacienda del Ayuntamiento de Aranda, Guillermo López, que cuantifica este incremento en su gran mayoría en la categoría de IBI urbano, con 900.000 euros más, mientras que el de rústica sufrirá un aumento de recaudación de a penas 50.000 euros.
A este aumento de la cuantía de cada recibo se suma que este año se incorporan al censo municipal de viviendas nuevas promociones inmobiliarias. «Con las nuevas construcciones que se han entregado, creo que hay dos promociones que se van a pagar por primera vez», especifica López.
El aumento de los recibos se viene realizando «de manera progresiva» desde el año 2015. «Fue cuando se quitó la anterior tasa de basuras, que fue cuando se aprobó esta subida paulatina, y por medio también hubo una actualización del valor catastral, que no depende de nosotros, pero que también hizo que subiera el IBI», añade el edil de Asuntos Económicos.
La subida de este impuesto directo local precede a una rebaja del mismo que se pretende poner en marcha para el año 2026. En la actualidad, el coste de la recogida y transporte de basura se incluye en el recibo del IBI. «Hace diez años, la tasa de basuras que teníamos había muchas reclamaciones porque es muy complicada de cobrar, por lo que decidieron quitarla al no ser obligatoria y meterlo dentro del IBI, por eso se produjo la subida progresiva que hemos tenido hasta este año», explica López.
Para el año que viene, el Ayuntamiento está obligado por ley a imponer una tasa específica de residuos «que incluya la recogida y el transporte, que será independiente y de como 3 millones de euros», especifica el concejal de Hacienda. De ahí que, insiste, «se rebajará el IBI porque, si no, pagaríamos dos veces la tasa de residuos».
Otras tasas locales. El bolsillo de los arandinos no va a sufrir más vaivenes con el resto de los recibos que emite el Ayuntamiento por la prestación de diversos servicios. De hecho, en el anteproyecto del Presupuesto de este año, que aún está en periodo de presentación de alegaciones por parte de los grupos de la oposición, se refleja una rebaja de más de un millón y medio de euros comparado con el año pasado, superando por poco los 7 millones para este 2025.
Esta reducción se debe a que no se contabiliza en el global de los ingresos por tasas los recibos mensuales extra que se están pasando para cobrar los dos años que se estuvo sin leer los contadores. «En 2024 contábamos con cobrar la tasa del agua pendiente de 2023 y 2024, que todo eran 4,5 millones, pero este año se contabiliza sólo la tasa de agua de este año, que serán dos millones menos», aclara el concejal de Hacienda.
En el lado contrario, varias tasas que van directamente a las arcas municipales van a sufrir un incremento este año. «En el caso de las instalaciones deportivas, que hasta ahora teníamos 12.000 euros por la reserva del Santiago Manguán o similares, pasa a 300.000 euros, que son los ingresos que están planificados sobre la piscina cubierta», puntualiza López ante la puesta en marcha de estas dependencias deportivas tras su remodelación.
A este incremento de los ingresos municipales se suma también, al menos sobre el papel del anteproyecto de Presupuesto, el cobro de multas de la ORA «que estaban infradotadas en el Presupuesto, es decir, se estaba recaudando más que lo que ponía». En cifras concretas, lo que hasta ahora era una previsión de ingresos de 380.000 euros, para este 2025 se estima que serán 600.000 euros, que es lo que se viene recaudando. A esta cuantía por multas de aparcamiento en zona regulada se suman las de entrada no permitida en la zona peatonal. «Al activar las cámaras de la zona centro, habrá más multas, porque hasta ahora no se estaban tramitando y con el nuevo sistema te multan nada más pasar sin permiso, lo que es un sistema más fiable para hacer cumplir esta restricción para los vehículos y, además, se traducirá en un incremento de ingresos por este motivo», explica el concejal de Hacienda según las cuentas del equipo de gobierno.