Una de las intervenciones a mayores que ofreció Etralux, la empresa adjudicataria de la obra de mejora en medio centenar de pasos de cebra de la ciudad con cargo a los fondos europeos Next Generation, fue la de reformar dos de estos cruces de la calle Condesa Mencía, donde el pasado año falleció una mujer a causa de un atropello y donde la visibilidad es reducida. Así, además de incluir cebreados inteligentes han incorporado semáforos que servirán también como sensores para medir la circulación.
Según explican desde el área de Tráfico, estos semáforos buscan reforzar la seguridad en dos pasos de cebra sobre los que los informes de la Policía Local y de los propios técnicos ya alertaban de cierta peligrosidad. Especialmente en dos de ellos, el que está frente a la iglesia Hermano San Rafael y el que está situado a la altura del centro de Aspanias, donde hace menos de un año falleció una mujer atropellada.
En primer lugar, el objetivo es reducir la velocidad de los vehículos que circulan por Condesa Mencía. Por otro lado, regular el paso de peatones, que además será inteligente. Estos nuevos reguladores contarán con sensores que permitirán, además, hacer un conteo de coches y personas para mejorar la eficiencia en la zona.
Desde el Ayuntamiento aclaran que esta intervención no es incompatible con la futura mejora de todo el bario de Vistalegre, pues desde el área de Urbanismo mantienen activo el proyecto de remodelación integral. En un principio, se cree que la mejor solución sería eliminar un carril por sentido y convertirlo en espacio para el estacionamiento en batería, alargar las orejeras de los pasos y retranquear las aceras.
A lo largo de estos meses se actuará en un total de 58 pasos de cebra (ya se han mejorado una quincena) para dotarles de mayor señalización. La obra supone un coste de más de 2,4 millones de euros de los cuáles 1,8 son fondos europeos. El compromiso para no perder la subvención es terminarla antes del 31 de diciembre, algo que parece que se cumplirá.