Ha sido su seña de identidad desde que llegó a Segunda División y el domingo lo acreditó de nuevo. Tras encajar cuatro goles en los dos anteriores partidos, contra Granada y Eibar, el Burgos CF volvió a dejar la portería a cero contra el Sporting de Gijón y recupera el cetro como el mejor equipo defensivamente de la categoría. Por contra, volvieron a manifestarse los problemas en ataque y sus bajas estadísticas en este apartado lo colocan como el tercer peor equipo en esta faceta, empatado con el Ibiza y solo mejor que Lugo y Real Oviedo.
«El Burgos juega a esto. Somos el equipo menos goleado y en eso nos basamos», declaró Julián Calero al final del partido contra el Sporting de Gijón. Y el entrenador también justificó la falta de gol. «No tenemos talento para ganar 3-0 pero sí lo tenemos en defensa», continuó, a la vez que recordó las bajas de Gaspar Campos y Álex Bermejo. Fue Curro Sánchez, uno de los futbolistas más talentosos de la plantilla, quien tuvo las mejores ocasiones, pero se estrelló contra el larguero y contra Cuéllar. También pudo marcar Mourad, pero falló su ocasión más clara y tampoco supo finalizar una llegada al área.
Además, el equipo no acaba de aprovechar las acciones a balón parado, un arma decisiva en esta y en todas las categoría. El año pasado sí tuvo buenos resultados, con Andy como lanzador y con futbolistas como Grego Sierra en el remate. No es así en la actual campaña pese a la fortaleza física de sus centrales y de sus mediocentros. La llegada de Goldar, un especialista en estas jugadas, no ha arreglado el problema. Tampoco el fichaje de Sergio Castel, castigado por las lesiones aunque el domingo dejó buenas sensaciones en los 30 minutos que estuvo sobre el terreno de juego.
Preocupante es la sequía de un futbolista como Pablo Valcarce, autor la pasada campaña de 10 goles y que aún no se ha estrenado. Es cierto que ha perdido protagonismo en el equipo, pero también que su rendimiento cuando está en el campo dista mucho del Valcarce de hace un año.
Tampoco Juan Artola acaba de convencer, también lastrado por su cada vez menor participación en el juego. Y lo mismo le pasa a Mourad. Los tres se han visto afectados por el protagonismo de Gaspar, Bermejo y Curro. Entre los tres llevan 14 de los 25 goles del equipo, mientras que Mourad ha marcado tres tantos y Artola otros dos.
Mejor le va en defensa al equipo burgalés. Los cuatro tantos que recibió Las Palmas en Santa Cruz de Tenerife han dejado al equipo burgalés en la primera posición como el menos goleado de la categoría. Esa es su esencia y lo ha hecho pese a perder en varias jornadas a uno de sus mejores hombres, Grego Sierra. La llegada de Goldar y el trabajo de Aitor Córdoba, Elgezabal y Atienza ha fortalecido esa esencia defensiva del equipo de Calero, que le llevó durante la primera parte de la competición a las portadas de los periódicos deportivos, con récords de partidos sin perder y con su portero, José Antonio Caro, como protagonista absoluto. Incluso llegó a liderar la clasificación. Sin embargo su falta de gol le ha alejado de esas zonas de privilegio.